El Ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, ha confirmado hoy que los precios del diésel en Colombia seguirán aumentando como parte de una estrategia gubernamental para enfrentar la inflación.
En una declaración realizada este martes, Bonilla destacó que el ajuste en los precios del diésel no será resultado de un acuerdo con los transportadores, sino que se implementará como una medida directa del Gobierno.
El ministro detalló que se prevé un incremento de 3.000 pesos por galón para el diésel en 2024, con un aumento adicional de 3.000 pesos para 2025. Esta decisión sigue al anuncio previo hecho en julio, durante una reunión con el gremio de transportadores.
“Enfrentamos una inflación que solo puede ser abordada con medidas reales. Por lo tanto, el ajuste en el precio del diésel es una de las acciones necesarias, aunque sabemos que será impopular. Esta es una medida que el Gobierno tomará sin acuerdos adicionales,” afirmó Bonilla.
Impacto en la sostenibilidad fiscal
El Contralor General de la República, Carlos Hernán Rodríguez, respaldó la medida, señalando que la eliminación del subsidio a la gasolina contribuirá al aumento de precios a corto plazo. Sin embargo, Rodríguez subrayó que esta política es crucial para asegurar la sostenibilidad fiscal del país.
Por su parte, la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia (Andi) y el Banco de la República han coincidido en que la política monetaria actual, que incluye tasas de interés bajas, está orientada a promover el crecimiento económico sostenido. En este contexto, las medidas de ajuste de precios se consideran necesarias para mantener el equilibrio fiscal y apoyar el crecimiento a largo plazo.
El anuncio del Ministro Bonilla marca un paso importante en las estrategias del Gobierno para controlar la inflación, aunque se anticipa que la medida podría enfrentar oposición debido al impacto en los costos del transporte y la vida cotidiana de los colombianos.