Las autoridades colombianas detuvieron a un hombre acusado de ser el jefe de sicarios de los Comandos de la Frontera, un grupo aliado con las disidencias de las FARC de la Segunda Marquetalia que opera en las fronteras con Ecuador y Perú, informó este viernes la Fiscalía.
Se trata de Kevin Alejandro Salazar Portilla, conocido como ‘El mocho’, que dirigía una fracción de los Comandos de la Frontera.
Este grupo está presente en los departamentos de Amazonas, Caquetá, Putumayo (sur) y Nariño (suroeste), y mantiene “una confrontación violenta con el frente Carolina Ramírez de las disidencias de las FARC por el control de las rentas ilícitas en zona de frontera con Ecuador”.
El frente Carolina Ramírez pertenece al Estado Mayor Central (EMC), principal disidencia de las FARC.
El acusado también sería el responsable de ejecutar homicidios selectivos y extorsiones en los municipios de Puerto Asís, Puerto Caicedo y Mocoa, en el departamento del Putumayo (sur).
“‘El Mocho’ habría iniciado su actuar delictivo en el grupo ilegal ‘La Constru’, dedicado a la producción y comercialización de estupefacientes, entre otras actividades ilícitas”, explicó la Fiscalía.
A Salazar, arrestado en Puerto Asís, le fue imputado el delito de concierto para delinquir agravado, cargo que no aceptó.
Los Comandos de la Frontera tienen como actividad principal la producción y el control del narcotráfico en las zonas fronterizas del país en alianza con la Segunda Marquetalia.
Este grupo tiene su origen en la unión de un grupo de disidentes de las FARC y un antiguo grupo de paramilitares desmovilizados conocido como la ‘La Constru’ o ‘La Mafia’, cuya actividad criminal estaba enfocada en la producción de cocaína y el tráfico de drogas en el sur de Colombia.
EFE