Son muy pocas las veces, en Colombia, que se han llevado a cabo elecciones parlamentarias con listas cerradas. El caso más recordado fue, en efecto, la plancha encabezada por el expresidente Álvaro Uribe, en 2014, cuando se inauguró el partido Centro Democrático y obtuvo 2.045.564 votos para Senado.
Sin embargo, para las elecciones de 2018, el uribismo optó por una lista abierta (con voto preferente), encabezada por el mismo expresidente Uribe, quien sacó una votación unipersonal de 875 mil, jalonando de tal manera varias curules debido a la incidencia de ese volumen electoral en la cifra repartidora.
En esa ocasión, otra participación importante fue la del exalcalde de Bogotá, Antanas Mockus, quien como cabeza de la lista abierta de la Alianza Verde obtuvo 540 mil votos. En ese sentido también jalonó un número importante de curules.
No obstante, para 2022 los anuncios sobre cabezas de lista no han producido mayores sorpresas, al menos en lo que va del ejercicio que culmina el próximo lunes, cuando se cierran las inscripciones oficiales.
Como se recuerda, en los comicios de 2018 para el Senado (en un monto similar a los de la Cámara) se registraron 15.309.895 votos válidos. Por las listas fueron 14,4 millones de sufragios y 835 mil en blanco. Los nulos y no marcados sumaron un poco más de dos millones de votos, lo cual indica un hecho bastante negativo en el desarrollo de la democracia colombiana.
Por lo pronto con miras a marzo próximo el ‘palo’ político es el de Caterine Ibargüen, cabeza de la lista abierta del partido de La U. Se trata de una deportista que permanece en el corazón de los colombianos por sus victorias mundiales en las competencias de salto largo y triple, así como por su desempeño en los Olímpicos durante la última década.
Ibargüen reemplaza a Roy Barreras, quien había sido la cabeza de lista de esta colectividad en 2018. La campaña de la galardonada saltadora se centrará en el liderazgo femenino, la política para superar la pobreza y las mejores condiciones para el deporte colombiano, según dijo a EL NUEVO SIGLO..
Centro Democrático
En las últimas semanas una amplia polémica se dio al interior del Centro Democrático por la cabeza de lista al Senado, luego de que se cumplieran los procedimientos internos para seleccionar candidato a la Presidencia, que ganó Óscar Iván Zuluaga. El buen desempeño de la senadora María Fernanda Cabal en esa contienda, al quedar segunda, hizo presumir que llevaría el número 1 en la plancha al Senado por esa colectividad.
No es un punto menor puesto que con la salida del expresidente Uribe del Senado, a raíz de enfrentar un proceso judicial que se mantiene pendiente de confirmarse o no la preclusión, su reemplazo en la cabeza de lista tiene una amplia connotación dentro de las preeminencias partidistas. Además de que, dentro del método del voto preferente, llevar el numero 1 implica una dosis adicional de votos frente a los demás aspirantes.
Dentro de las colectividades comúnmente llamadas tradicionales, como los partidos Conservador y Liberal, las cabezas de listas al Senado no han presentado mayores sorpresas y se han decantado por vía de la propia bancada.
De suyo, el conservatismo escogió de antemano candidato presidencial en la figura del joven parlamentario costeño David Barguil, quien había sacado en las elecciones anteriores la máxima votación del partido en esa corporación legislativa (alrededor de 140 mil votos). El aspirante hace parte hoy de la coalición Equipo por Colombia.
Bajo de esa perspectiva, la cabeza de lista al Senado, de acuerdo con los pactos internos, quedó ahora en manos del veterano senador del Atlántico, Efraín Cepeda, quien de antemano renunció a su precandidatura presidencial. Será una plancha abierta con la mayoría de senadores actuales en procura de la reelección. Como novedad el conservatismo contará con nuevas fuerzas en Santander, en donde había perdido vigencia parlamentaria.
Así como varias colectividades ya han puesto sobre la mesa sus cabezas de lista para Senado, una que no lo ha hecho es precisamente Cambio Radical, partido del cual es jefe natural el exvicepresidente Germán Vargas Lleras.
En los mentideros políticos se da por descontado que la cabeza de lista será el exministro de las TIC, David Luna, mientras que algunos miembros de la bancada han anunciado que no aspirarán a la reelección. A su turno Rodrigo Lara se fue a las toldas del Nuevo Liberalismo.
En 2018 uno de los ‘palos’ de las elecciones parlamentarias fue este partido, que obtuvo 16 curules en el Senado con una votación de 2.155.487, siendo la segunda colectividad con mayor apoyo.
Alianza Verde
Después de muchos ires y venires la coalición presidencial de la Centro Esperanza esperaba sacar una lista única al Senado pero, ante las divisiones, terminó por sacar dos planchas.
Varios intentos se hicieron para lograr una sola lista, en cabeza del ex vicepresidente y exjefe negociador de paz Humberto De la Calle, pero cuando afloraron las divisiones éste prefirió abstenerse de participar, puesto que no se había logrado el objetivo de unidad electoral planteada.
Inclusive en medio de las divisiones afloró un cortocircuito (rápidamente subsanado) entre los integrantes de la coalición, específicamente el senador y aspirante presidencial Jorge Enrique Robledo y los dirigentes del Nuevo Liberalismo, Juan Manuel y Carlos Fernando Galán.
En ese orden de ideas, se optó por presentar dos listas: una representativa de la coalición, uniendo a los diferentes sectores que la configuran (Alianza Verde, Dignidad por Colombia, Colombia Renaciente, ASI, Verde Oxígeno y Compromiso Ciudadano, de Sergio Fajardo), y otra del Nuevo Liberalismo. La primera será abierta (voto preferente) y la segunda cerrada.
Pacto Histórico
El candidato presidencial que aparece con las mayores posibilidades en las encuestas, Gustavo Petro, ha organizado la coalición Pacto Histórico y bajo ella presentará listas al Senado y la Cámara, pese a que un fallo de la Corte Constitucional le devolvió la personería jurídica de su partido Colombia Humana.
En principio la cabeza de lista para Senado le fue ofrecida a la actriz Margarita Rosa de Francisco pero ella dijo no servir para temas electorales. También Petro le ha insistido a la líder social Francia Márquez que encabece la plancha. pero ella prefiere mantener su precandidatura presidencial e ir a la consulta del Pacto Histórico en marzo próximo.
El partido Comunista no sacará listas propias, sino que lo hará dentro de los avales conjuntos del Pacto Histórico, lo mismo que la Unión Patriótica. Igual pasa con Oxígeno Verde que, como se dijo, estará dentro de la lista de la Coalición de la Esperanza, que incluso puede ser liderada por la excandidata secuestrada.
De otra parte, a raíz del acuerdo de La Habana el partido Farc, hoy Comunes, tiene cinco curules automáticas garantizadas sin necesidad de umbral. En la ocasión anterior obtuvieron la exigua cifra de 52 mil votos al Senado, de modo que no se les aplicaron las reglas generales.