El abogado Miguel Martínez, candidato al Concejo de Santa Marta, denunció que fue amenazado de muerte luego de que el CNE revocara la candidatura de Patricia Caicedo a la alcaldía de la ciudad por el partido Fuerza Ciudadana.
Desde hace algún tiempo Martínez se ha convertido en un veedor activo de la política en su región.
El pasado 29 de septiembre el Consejo Nacional Electoral (CNE) decidió revocar la candidatura de Caicedo, por ser hermana de dos personas que han fungido como ordenadores del gasto en el departamento de Magdalena. Esto iría en contra del artículo 95 de la Ley 136 de 1994, sobre inhabilidades políticas.
Tras la revocatoria de la aspiración de Caidedo y la designación extemporánea de Jorge Agudelo como candidato suplente, el abogado Martínez denunció haber recibido varias amenazas de muerte en su contra.
Al respecto, el también candidato al Concejo de Santa Marta habló. Señaló que los hostigamientos provienen de integrantes del partido Fuerza Ciudadana, del cual varios candidatos han sido revocados a raíz de sus denuncias.
“Son manifestaciones directas en contra de mi integridad física, las cuales no han sido escuchadas por las autoridades, precisamente porque los que están haciendo esas amenazas son la institucionalidad”, aseveró.
En su conversación, el abogado Miguel Martínez explicó que empezó a recibir amenazas luego de la revocatoria de la candidatura de Patricia Caicedo, hermana del exgobernador de Magdalena, Carlos Caicedo, así como de los concejales del partido Fuerza Ciudadana, Efraín Vargas y Carlos Robles.
La decisión legal del CNE, en los casos de Vargas y Robles, se habría dado por incurrir en el delito de doble militancia.
“A raíz de eso he recibido amenazas de muerte directa, así como incitaciones a que me causen daño”, dijo. Y añadió que ha sido relacionado sin fundamento con distintos clanes políticos.
Pese a las denuncias interpuestas ante la Fiscalía General de la Nación, la Defensoría del Pueblo y la Unidad Nacional de Protección, el candidato Martínez indicó que no ha sido atendido. “Han transcurrido más de quince días y yo sigo sin protección”, aseguró.
Según explicó, al no lograr su objetivo, Rafael Martínez dijo a la salida de la Registraduría en Santa Marta que al abogado Martínez “toca matarlo”. La declaración fue escuchada por las personas presentes en ese momento y así llegó a su conocimiento.
Luego, comentó, por personas cercanas se enteró de que en el “bajo mundo” se planeaba atentar contra su vida, como represalia por las denuncias que causaron la revocatoria de las candidaturas de miembros del partido Fuerza Ciudadana.