Un juez federal bloqueó este viernes, de manera temporal, el plan del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de forzar la salida de miles de empleados de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID).
La decisión fue tomada por el magistrado Carl Nichols, del Tribunal de Distrito para el Distrito de Columbia, quien ordenó la suspensión del plan tras escuchar los argumentos de la Administración republicana y de dos grupos que representan a trabajadores federales.
El plan gubernamental contemplaba la baja administrativa de 2.200 empleados dentro del país y la retirada de casi todos los trabajadores en el extranjero en un plazo de 30 días. Según fuentes oficiales, 500 empleados ya habían aceptado la baja antes de la decisión judicial.
Recorte Drástico en USAID
Según reveló The New York Times, la directriz de Trump buscaba reducir drásticamente la plantilla de USAID, eliminando la mayoría de sus 10.000 empleados y conservando solo 290 puestos considerados esenciales. Entre los trabajadores que se mantendrían en sus funciones, figuraban 77 en actividades de salud y 78 en asistencia humanitaria.
Las oficinas de USAID dedicadas a la cooperación internacional también sufrirían un recorte severo, reduciéndose a 12 empleados para África, 8 para Latinoamérica y el Caribe, y 21 para Oriente Medio y Asia.
Justificación de la Administración Trump
El secretario de Estado, Marco Rubio, quien ahora supervisa USAID por decisión de Trump, justificó la medida argumentando razones de eficiencia y acusando a los trabajadores de la agencia de “insubordinación”. En una entrevista con Fox News, Rubio afirmó que los empleados de USAID fueron “totalmente reacios a cooperar” con la agenda de la Administración, por lo que no quedó “otra opción” más que tomar decisiones “drásticas”.
El plan de desmantelar USAID se alineaba con la intención de Trump de reducir el gasto en cooperación internacional, lo que afectaría tanto a USAID como a agencias de la ONU y ONG que dependen de los fondos estadounidenses. Según Naciones Unidas, EE.UU. es responsable del 47 % del gasto global en asistencia humanitaria, por lo que la medida suponía un fuerte impacto en la cooperación mundial.
Reacciones y Futuro de la Agencia
El fallo judicial otorga un respiro a los empleados de USAID y a las organizaciones que dependen de su apoyo, pero la Administración Trump podría apelar la decisión. Mientras tanto, la comunidad internacional y los sectores afectados en EE.UU. siguen atentos al desenlace de este conflicto, que podría definir el futuro de la política de cooperación estadounidense.