Así se conoció que el exvicepresidente, Francisco “Pacho” Santos, un uribista de tiempo completo, se refirió mirando a las próximas elecciones donde se dará el cambio de gobierno.
Asegura “Pacho” Santos que Federico Gutiérrez para el partido político Centro Democrático “es una esperanza”, al tiempo que menciona que el candidato de la Colombia Humana Gustavo Petro “tocó su techo”, asegurando que el expresidente Juan Manuel Santos “está metiendo mano” en la coalición de derecha Equipo por Colombia.
Francisco Santos aprovechando que está por fuera del Gobierno que caduca este año. No obstante, se muestra muy preocupado por la temporada electoral. Asimismo piensa que Gustavo Petro está dispuesto a apoyar “al que sea”, analiza a Óscar Iván Zuluaga, le coquetea a Federico Gutiérrez y la emprende contra su primo, el expresidente Juan Manuel Santos, a quien señala no solo de “meter mano” en las elecciones, sino del deterioro de las relaciones con Estados Unidos.
Pacho sin titubeos admite que al presidente Iván Duque “le quedó grande la seguridad” –una de las banderas del Centro Democrático– y reconoce que en este gobierno, aun cuando fue un mantra de campaña, sí hubo mermelada parlamentaria. Incluso, se atreve a hablar de Estados Unidos, criticando que “está distraidísimo” y que América Latina no es una prioridad. También hubo espacio para hablar de su salida de la Embajada de Estados Unidos por una supuesta injerencia en las elecciones de ese país y hasta de su hijo, el representante contracorriente del uribismo Gabriel Santos.
Esto apenas está empezando. La campaña hay que dividirla en dos partes: Congreso y presidenciales. En las legislativas tendremos el gran reto de comunicación del Centro Democrático. Nuestra colectividad tiene que hacer una apuesta muy agresiva en algo que es verdad: que somos el único partido que en serio quiere parar el populismo. Colombia tiene ese susto, esa preocupación y hay que hacer explícito que somos la barrera al populismo, el obstáculo para que llegue a Colombia.
Se trata de un mensaje del que nadie se puede apropiar sino nosotros, porque eso ha sido nuestro partido y ahí hay un espacio gigantesco que, si se aprovecha bien y somos agresivos con el mensaje, permitirá que nos vaya muy bien en las elecciones al Congreso. Y no nos digamos mentiras: el partido no es de maquinarías, no las tenemos. Ha habido uno que otro parlamentario a los que el Gobierno le dio muchas cosas, pero ninguno de ellos va ahí, cosa que me parece que es buena. Ninguno con los que el Gobierno fue muy generoso en burocracia va a ir y es un buen mensaje para el Centro Democrático, porque volvemos a lo que somos.
Luego de esto, con tres millones de votos y con un muy buen número de senadores y representantes, Óscar Iván empieza a tener la fuerza que necesitamos que tenga para que comiencen a verlo, porque hoy entre tantos no lo ven. Por eso yo no voy a votar por la consulta, votaré por el Centro Democrático.