Tras su retiro de la sesión al no tener garantías al momento de realizar una modificación en el orden del día durante la elección de la mesa directiva de la Comisión de la Mujer en el Concejo de Barranquilla, la cabildante Heidy Barrera cuestionó que la tarea para la que fue creada la comisión no le está cumpliendo a las mujeres de la ciudad, al no ejecutarse las funciones como el control político y el seguimiento a temas de mujer, teniendo en cuenta los índices de violencia contra el género femenino en el año 2022, así como la celebración de audiencias públicas como parte del compromiso de salir a las calles para escuchar de primera voz las necesidades y las problemáticas que enfrentan.
Asimismo, indicó que no se promovió en el sector privado acciones que favorezcan la equidad para las mujeres en el ámbito laboral y social, además del acompañamiento interinstitucional de organismos municipales nacionales e internacionales, entidades públicas o privadas para el desarrollo de su misión institucional.
“La comisión no se puede convertir en un escampadero político para hacer campaña de muchas personas que quieren tratar de tener una capa de defensores o de lucha a favor de las mujeres que, con hechos y con realidades, hoy en acuerdos distritales no se ven evidenciados y no se demuestran. Yo creo que más allá de una situación política, de mayorías y minorías en el Concejo, lo que debe imperar es tratar de proteger y salvaguardar la vida, integridad y honra de las mujeres barranquilleras y es lo que debe preservarse”, manifestó Barrera Vergara.
La concejal del Partido de la U también llamó la atención sobre la ausencia de las mujeres delegadas que hacen parte de la Comisión, afectando el principio de democracia participativa.
“Para poder hacer proyectos de acuerdo hay que salir a las calles, visitar las localidades y escuchar a las que tienen el problema. Estar uno sentado desde el concejo hablando no se va a lograr nada”, enfatizó.
No ocultó su preocupación frente a las cifras entregadas por la Policía Nacional que indican un aumento de 31% en violencia intrafamiliar, víctimas de hurto en un 44% y, en lo corrido del año, ya se han registrado 2 asesinatos de mujeres en la ciudad.