En días pasados se hizo público un informe conjunto sobre el impacto de la pandemia por Coviden America Latina y el Caribe (LATAM), elaborado por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y suscrito por Alicia Bárcena, Secretaria Ejecutiva de la CEPAL y Carissa F. Etienne, Directora de la OPS.
En este informe, el segundo que se hace al respecto por parte de ambas entidades, se muestra cómo la pandemia por el coronavirus SARS-CoV-2 que inició en LATAM en febrero de 2020, hasta este momento ya cobró un millón y medio de vidas y se han detectado más de 44 millones de casos confirmados en esta región. Así mismo, esta pandemia ha hecho que en LATAM se concentre una quinta parte del total de casos de Covid y cerca del 30% de las muertes por esta causa en el mundo,siendo que esta región sólo posee el 8,4% de la población mundial.
El informe en mención, denominado “La prolongación de la crisis sanitaria y su impacto en la salud, la economía y el desarrollo social”, analizó las consecuencias de la pandemia por Covid en esta región del mundo más allá del tema puramente infecto-contagioso generado por el coronavirus así como los factores que en los diferentes países de LATAM han contribuido a que dicha pandemia haya generado las cifras de contactos y fallecidos antes citadas. En ese orden de ideas, el informe revisa la evolución de la pandemia en esta parte del mundo, así como sus implicaciones para la salud de la población, la sociedad y la economía.
Lo primero que merece destacarse de lo analizado por la CEPAL y la OPS en el impacto de la pandemia es la relación que existe entre la salud y el componente de reactivación económica. Desde la perspectiva de Alicia Bárcena, para la CEPAL no existe la menor posibilidad de recuperación económica sostenible en los países de LATAM sin salud de sus poblaciones, a tal punto que según la funcionaria, la actual crisis sanitaria derivada de la pandemia se ha prolongado junto con la persistencia de la crisis social, por eso sin salud de quienes habitan esta parte del mundo no podrá haber recuperación económica.
Desde la orilla de la OPS, Carisse Etienne sostiene que justo en estos momentos es que resulta absolutamente prioritario la inversión en salud y de manera específica exhorta a que los países de la región impulsen el aumento de las inversiones en atención primaria.
Según estas dos agencias internacionales, resulta relevante después de revisarse el comportamiento de la pandemia desde su inicio en LATAM en febrero de 2020 que las debilidades históricas de los sistemas de salud, así como las desigualdades estructurales en estas naciones, características ambas de la región, son razones de peso que siguen dificultando el control del avance de la propagación del coronavirus, generando impacto en la salud física de las personas y en la salud económica de los países en esta parte del mundo.
El informe señala que aunque existen “señales positivas” de recuperación económica y se evidencian varias formas de respuesta de los sistemas de salud para el control pandémico, resulta innegable “enfatizar la persistencia de condiciones estructurales de inequidad en materia de salud en la región”. Por ello es claro para los investigadores que además de la falta de control pandémico, existen aún “los retrocesos sociales en materia de pobreza y pobreza extrema, desigualdad, inequidad en el acceso a la salud, educación y nutrición, entre otros, lo que refleja que el repunte económico no será suficiente para que la recuperación sea transformadora, con igualdad y con sostenibilidad ambiental”.
Resulta valioso el análisis que en el informe se hace de los planes nacionales de vacunación contra el coronavirus en los países de LATAM, toda vez que en esta región se ha hecho más que evidente cómo durante la pandemia se produjo la interrupción de servicios esenciales de salud no relacionados con Covid, lo que significó la afectación de la garantía al acceso a la salud de estas poblaciones. Para la CEPAL y la OPS son constatables las limitaciones en los avances de las coberturas de vacunación en varios países de LATAM. Por eso resulta además de concluyente, muy preocupante uno de los resultados de la investigación: “la desigual distribución y la asimetría mundial entre los países desarrollados y los países en desarrollo se traduce en que, a septiembre de 2021, apenas un 30% de la población de la región contara con el esquema completo de vacunación”.
Ante tales circunstancias como la interrupción de servicios esenciales no relacionados con Covid, la bajísima cobertura de vacunación alcanzada en LATAM contra el SARS-CoV-2, además de lo antes expuesto (“los retrocesos sociales en materia de pobreza y pobreza extrema, desigualdad, inequidad en el acceso a la salud, educación y nutrición”), es urgente y prioritario garantizar a las poblaciones de los países del área la provisión de servicios esenciales en este marco vigente aún de la pandemia, concibiéndose a la vacunación contra el coronavirus como uno de los mayores retos de los gobernantes para poder adelantar un control pandémico efectivo junto con la continuidad de la aplicación de las medidas de protección social y de salud pública.
La CEPAL y la OPS por ello contemplan frente a ese escenario que debe darse el fortalecimiento de los mecanismos de coordinación, integración regional y cooperación internacional. Se invita por parte de estas agencias internacionales a llegar inclusive a la transformación de los sistemas de salud “con base en la atención primaria de salud, teniendo como norte la salud universal, fortaleciendo las capacidades institucionales de las autoridades de salud y el avance hacia un sistema de salud resiliente y con capacidad de respuesta a los desafíos actuales y futuros”. Para lograr ese propósito, se propone en el informe el imperioso aumento del gasto público en salud, haciéndolo con equidad y eficiencia, dándole prioridad estratégica al primer nivel de atención.
Para los países de la región resulta entonces un asunto de extrema urgencia enfocar el control pandémico con una visión estratégica integral con una agenda institucional que permita retomar el sendero para alcanzar el cumplimiento de los objetivos para el desarrollo sostenible, que no pueden dejar de referenciarse por el momento pandémico por muy grave que sean las consecuencias que esta tragedia haya traído.
En síntesis, el análisis que se hace por parte de la CEPAL y OPS de la pandemia en los países de LATAM, desde un “enfoque más allá del coronavirus” que la produjo, evidencia que dos factores como la debilidad comprobada de los sistema de salud y las desigualdades existentes en estos países, son causantes de la prolongación de la actual crisis sanitaria por Covid y constituyen una amenaza cierta para la recuperación económica de la región. Por eso a los gobernantes nacionales y territoriales de estos países les quedan por lo menos estas cuatro tareas muy precisas para contrarrestar esa situación: (1) acelerar la vacunación para mejorar la cobertura de protección de la población, (2) iniciar cuanto antes la transformación de los sistemas de salud con reformas pertinentes y ajustadas a la realidad epidemiológica y económica de la actualidad, (3) fortalecer de manera significativa y pronta la inversión pública, especialmente la de salud en atención primaria en salud, y (4) consolidar los estados de bienestar.