Por Carlos Guzmán
En Colombia, hablar de divorcio solía ser sinónimo de largos procesos judiciales, pruebas de culpabilidad y culpas expuestas ante tribunales. Sin embargo, con la reciente aprobación de la ley que permite el divorcio por la sola voluntad de uno de los cónyuges, el panorama ha dado un giro significativo. Ahora, basta con que uno de los dos decida dar por terminada la unión para que se inicie un proceso que, en teoría, debería ser más ágil y menos traumático.
La pregunta que surge es: ¿es esto un avance en materia de derechos individuales o un riesgo para la estabilidad familiar?
Una ley que marca un cambio de paradigma
El Proyecto de Ley 316 de 2023 Cámara – 64 de 2023 Senado, aprobado en diciembre, agrega una décima causal al artículo 154 del Código Civil, permitiendo el divorcio por la sola voluntad de cualquiera de los cónyuges. No será necesario probar infidelidades, maltratos o abandonos: si uno de los cónyuges quiere el divorcio, tendrá derecho a solicitarlo.
Lo más llamativo de esta ley es su enfoque en la voluntad individual como suficiente para disolver un vínculo matrimonial. Esto refuerza el principio de autonomía personal, en el que nadie debería permanecer en una relación que no desea.
Puntos clave de la ley
- El requisito de la terapia familiar previa: Aunque el divorcio puede ser unilateral, se requerirá asistir a al menos 10 sesiones de terapia psicológica familiar, a menos que una de las partes se niegue.
- Propuestas de divorcio: El cónyuge solicitante debe presentar un plan que incluya temas como custodia de hijos, alimentos y liquidación de bienes.
- Protección de menores y partes vulnerables: El juez revisará de oficio las propuestas de alimentos y demás medidas para garantizar el bienestar de los niños y cónyuges sin medios de subsistencia.
Ventajas y críticas
- Ventajas:
- Mayor libertad personal: Permite que las personas puedan salir de un matrimonio infeliz sin barreras legales.
- Reducción de procesos litigiosos: Se espera que la carga judicial disminuya.
- Evita confrontaciones innecesarias: Al eliminar la búsqueda de culpables, se reducen los conflictos emocionales y legales.
- Críticas:
- Impacto en la estabilidad familiar: Algunos sectores argumentan que esta medida puede trivializar el matrimonio y afectar a los hijos de parejas que decidan divorciarse sin mayor análisis.
- Posible abuso del sistema: Existe el temor de que, al no haber causales específicas, se puedan presentar solicitudes sin justificación real.
Un debate abierto
Mientras algunos aplauden la ley como un avance hacia una sociedad más moderna y libre, otros ven con preocupación sus posibles implicaciones sociales. Lo cierto es que este cambio exige que tanto el Estado como la sociedad enfoquen esfuerzos en la protección de los más vulnerables, especialmente los hijos y los cónyuges sin recursos económicos.
Reflexión final: el derecho a decidir
El divorcio por voluntad unilateral es, sin duda, un paso hacia el reconocimiento de la autonomía individual. No obstante, recordemos que la libertad siempre debe ir acompañada de responsabilidad y empatía. Que esta ley sirva para que, cuando el amor se acabe, las familias puedan disolverse con dignidad y respeto.
¡Felices fiestas para todos nuestros lectores!
Llegamos al final de este 2024 con grandes desafíos y aprendizajes. A ustedes, quienes nos acompañan cada 15 días, les agradezco por su tiempo y confianza. ¡Les deseo una Feliz Navidad y un próspero Año Nuevo, lleno de amor, paz y muchas sonrisas! Nos reencontraremos en enero de 2025 con más temas de interés jurídico.
¡Hasta pronto!