Un nuevo y aberrante caso de maltrato femenino se conoció en las últimas horas en Sao Paulo, Brasil.
La víctima de este episodio de horror, identificada como Tayane Caldas, de 18 años, salió de su casa el pasado viernes y de pronto su ex novio se le acercó y la obligó a subirse a un auto.
Gabriel Henrique Alves Coelho, el novio agresor, no aceptaba el final de la relación y por eso la secuestró y la llevó a su hogar, donde la sometió a una sesión de tortura, con agresiones e insultos. La tuvo todo el día encerrada, la golpeó y le tatuó su nombre en la cara.
Esta no es la primera vez que sucede, la joven de San Pablo venía sufriendo los violentos ataques de su ex novio desde hacía tiempo y, según relató, en otras dos ocasiones, él ya le había marcado tatuajes con su nombre. Primero en el pecho y luego en la ingle.
Es por eso que Tayane tenía una medida de protección contra Gabriel y la madre, Deborah Velloso, seguía de cerca lo que sucedía con su hija cada vez que salía de su casa. En general ella no salía sola por temor a que la atrapara su ex, pero ese día nadie pudo acompañarla.
“Me ató los dos brazos y dijo que me iba a tatuar la cara. Lloré, supliqué. Le pedí que no lo hiciera”.
Cuando su hija desapareció, Deborah entró en pánico. Supo que su hija estaba con Alves Coelho y trató de hablar con el joven, que le envió un audio diciéndole que de nada servía hablar, que nada cambiaría.
Mientras tanto, en la vivienda del joven de 20 años, Tayane estaba atada y ya había sufrido varios golpes, pero todavía faltaba lo peor. Su madre trataba de salvarla pero el violento ex novio estaba decidido a marcarle el rostro.
“Inmediatamente después de los ataques, me ató los dos brazos y dijo que me iba a tatuar la cara. Lloré, supliqué. Le pedí que no lo hiciera porque destruiría mi vida y él dijo que lo haría de todos modos. Y mientras gritaba, me golpeó. Solo vi el tatuaje hecho después y solo pude llorar”, confesó Tayane.
“Me marcó y dijo que soy de su propiedad”.
Desesperada, la madre de la joven presentó una denuncia policial contra el exnovio de su hija y finalmente el sábado fue encontrada. En su cara se podía ver el nombre Gabriel Coelho tatuado. El joven quedó detenido y fue trasladado al Centro de Detención Provisional por incumplir una medida de restricción perimetral. Desde entonces la Policía Civil investiga el caso.
“Cuando me miré en el espejo, ya no era yo. No soy yo con esto de aquí”, contó Tayane en referencia al tatuaje que le marcó el joven en su rostro. “Para mí, me mató por dentro, terminó conmigo con esto de marcarme y decir que soy de su propiedad”.
Años de violencia y abuso
Tayane había conocido al joven hace 6 años y hacía dos años comenzaron su relación. Los primeros meses de noviazgo eran tranquilos, según Tayane, pero al poco tiempo Gabriel comenzó a tener comportamientos posesivos y luego empezaron las agresiones.
Gabriel comenzó a tener comportamientos posesivos y luego empezaron las agresiones.
“Me empezó a prohibir que me pusiera un conjunto, después no me dejaba caminar con mis amigos y luego comenzaron los golpes. Terminé contándoselo a mi mamá y me separé”. Sin embargo, él la convenció de que todo mejoraría: “A los ocho meses me dijo que iba a cambiar y acepté, fue mi mayor error”, señaló al medio de Brasil.
Se fueron a vivir juntos y allí se dieron las dos anteriores agresiones con tatuajes en el pecho y la ingle. Como pudo, escapó. Regresó a casa de sus padres y llevó el caso a la justicia. Se impuso una restricción perimetral y ella recibió un dispositivo de protección, parecía que lo peor ya había pasado: “Conseguí trabajo y estaba haciendo mi vida”.
Pero Coelho volvió al ataque: “Me amenazó, ya no tenía redes sociales, ni celular, hasta que me agarró en la calle y dijo que iba a cumplir con su promesa de tatuarme la cara con su nombre”.
Finalmente el joven fue detenido después de que sus amenazas se hicieron realidad. Ahora ella asegura que dejó el miedo atrás: “Solo quiero que la gente que me está viendo la cara así, que me vea, que no tenga miedo. No se puede tener miedo, hay que denunciarlo, porque todo empeora”.