El magnate Donald Trump, nuevamente elegido presidente en las elecciones del 5 de noviembre de 2024, nació el 14 de junio de 1946 en Queens (Nueva York).
Proveniente de una familia descendiente de alemanes, se licenció en Finanzas y a los 28 años asumió el mando de la inmobiliaria de su padre. Posteriormente, construyó un imperio millonario que no ha estado exento de controversias por deudas y evasiones de impuestos.
Antes de conseguir la carrera política que hoy lo ha llevado a ser elegido presidente por segunda vez, Trump ya había adquirido fama gracias al mundo de la farándula y la televisión, cuando presentó su propio programa, ‘El aprendiz’ (‘The Apprentice’), en el cual despedía a concursantes que aspiraban a trabajar en su empresa.
En 2015, el Partido Republicano se tomó como una broma el anuncio de su primera carrera presidencial cuando bajó las escaleras mecánicas doradas de la Torre Trump. Sin embargo, fue precisamente esta imagen alternativa y alejada de la política la que consiguió catapultarlo a su primera nominación.
En ese entonces, prometió construir un muro en la frontera entre México y Estados Unidos y consiguió derrotar en las urnas a Hilary Clinton en 2016 gracias a su conexión con la clase trabajadora blanca que quería “hacer a Estados Unidos grande de nuevo” (con el eslogan ‘Make America Great Again’) tras sentirse víctima de la globalización.
Desde el poder, su estilo político estuvo marcado por la irreverencia y la confrontación, al punto en que popularizó el concepto ‘fake news’ (‘noticias falsas’) para atacar a los medios de comunicación y a sus contradictores a pesar de él mismo ser responsable de difundir mentiras.
En 2020, perdió en las urnas contra Joe Biden y jamás admitió la derrota, aprovechando para difundir la idea de un supuesto fraude electoral. No obstante, los tribunales desestimaron todas sus demandas, aunque una horda de fanáticos trumpistas asaltó el Capitolio el 6 de enero de 2021 en un frustrado intento por frenar el relevo de mandato.
Posteriormente, Trump logró utilizar a su favor tanto el descontento por la elevada inflación como sus líos judiciales. En este momento, su nombre resonó en los tribunales por el asalto al Capitolio y la condena por los pagos irregulares a la actriz porno Stormy Daniels, que le supuso la primera condena a un expresidente y que todavía está a la espera de una sentencia.