Funcionarios de la Oficina para las Investigaciones de Corrupción de Funcionarios de Alto Rango (CIO por sus siglas en inglés) y la Policía entraron este viernes (ya en Corea del Sur) a la residencia presidencial en Seúl para ejecutar la orden de detención temporal contra el presidente surcoreano, Yoon Suk-yeol, por su imposición de la ley marcial.
“Hemos comenzado a ejecutar una orden de detención contra el presidente Yoon”, dijo el CIO en un comunicado después de que en la víspera los seguidores del mandatario tuvieran que ser dispersados tras intentar bloquear el acceso a la residencia.
La agencia Yonhap informó de que el equipo que acudió al complejo, formado por unos 30 integrantes del CIO y uno 120 policías, mantuvo una confrontación con una unidad militar que protege el perímetro y que se cree que pertenecería al Comando de Defensa de la Capital (única unidad de las Fuerzas Armadas que responde directamente al jefe de Estado).
Eventualmente unos 80 efectivos (70 policías han permanecido desplegados en la entrada de la residencia) han superado el control militar y han accedido al recinto, donde están lidiando con el servicio de seguridad presidencial para hacer efectiva tanto la orden de arresto como la de registro que tienen en su poder.