La líder opositora venezolana, María Corina Machado, afirmó que el 10 de enero será una “prueba de fuego” para Nicolás Maduro y confirmó que saldrá de la clandestinidad para unirse a la protesta convocada antes de la investidura presidencial.
Machado, inhabilitada para ejercer cargos públicos, llamó a manifestaciones en Venezuela y en varias ciudades del mundo, instando a la participación de todas las edades.
Desde su escondite, aseguró que no se perderá esta fecha histórica, a pesar de los riesgos para su seguridad.