David Knezevich, empresario serbio-estadounidense acusado de secuestrar y asesinar a su esposa, la colombiana Ana Knezevich Henao, fue encontrado muerto este lunes en una celda del Centro de Detención Federal de Miami. De acuerdo con las primeras informaciones, se habría quitado la vida mientras se encontraba a la espera de juicio.
La abogada de Knezevich, Jayne Weintraub, confirmó al diario Miami Herald que su cliente fue encontrado sin vida en su celda y describió la noticia como «simplemente terrible». Añadió que, durante su último encuentro, él se mostró «muy agradecido y educado».
Por su parte, la familia de Ana Henao expresó su dolor mediante un comunicado: «El suicidio del asesino de Ana cierra un capítulo doloroso en nuestras vidas, lleno del temor de que no enfrentara la justicia. Ahora, es posible que nunca sepamos dónde dejó el cuerpo de Ana». También lamentaron que «es un cruel insulto final que nunca podamos recuperar los restos de Ana ni conocer la magnitud de la traición que sufrió».