Una polémica ha desatado el hecho que el Tribunal Superior de Bogotá reconociera como legítima defensa cuando un hombre golpeó a una su pareja en medio de un forcejeó por recuperar su celular.
“Obró en legítima protección de un bien jurídico tutelado con rango de derecho fundamental – la intimidad-, ante el riesgo inminente de vulneración por parte de su excompañera sentimental, quien de forma abusiva, sin autorización del titular, pretendía tomar el teléfono celular con la finalidad de revisar su correspondencia privada”, señaló el Tribunal.
Uno de los sustento que encontró el Tribunal, fue el dictamen de Medicina Legal, quien que señala que no encontró “ninguna otra lesión diferente al brazo izquierdo”. Es decir que el hombre no empleó fuerza desproporcionada.