El Ministro de Hacienda y Crédito Público de Colombia, Ricardo Bonilla, ha anunciado que tanto el precio del ACPM (diésel) como los peajes experimentarán aumentos significativos en el año 2024. Esta noticia surge en medio de un debate sobre la secuencia de estos incrementos propuestos por gremios de transporte de carga y la viabilidad fiscal de dicha propuesta.
Según Bonilla, se ha descartado la idea de elevar primero el precio del ACPM y luego los costos de los peajes, argumentando que esto no sería factible debido al déficit actual del Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles (Fepc). El Ministro señaló que el déficit del Fepc asciende a 100 billones de pesos, mientras que el valor total de los activos de camiones de carga en el país se estima en 83 billones de pesos, lo que ilustra la magnitud del problema.
El aumento en el precio del diésel se prevé que comience en febrero de 2024, con el objetivo de reducir el déficit en este sector. Bonilla enfatizó que el aumento no será brusco, sino un proceso organizado que se llevará a cabo durante aproximadamente dieciocho meses.
Por otro lado, los gremios de transporte, encabezados por la presidenta de Colfecar, Nidia Hernández, han expresado su preocupación por esta decisión. Aseguran que el incremento en el precio del diésel llevará a la inviabilidad de sus operaciones, dado que el 97% de la carga en Colombia se transporta por carretera. Esto significa que cualquier aumento en los costos de combustible y peajes impactará directamente en el costo de los productos, alimentos y la canasta familiar, lo que podría traducirse en un aumento generalizado de precios para los consumidores.