En el cierre del Carnaval de Barranquilla de este 2024, Asovendedores entrega el balance de lo que dejó la fiesta más importante del país.
Según Joaquín Cervantes, presidente de la organización, las ventas descendieron en comparación con el 2023.
“Las ventas de este año relacionadas con el Carnaval, en lo que tiene que ver con ropa, calzado y accesorios, tanto en el comercio formal, como informal presentaron una disminución significativa. El año pasado las ventas aumentaron en un 45 por ciento, mientras que en esta vigencia alcanzaron un 25 por ciento. Consideramos que factores como el hecho de que el tiempo entre diciembre, los precarnavales y la realización de la fiesta sea corto, y competir a la vez con la temporada escolar y la inflación hacen que nuestras ventas no alcancen cifras importantes”, señaló Cervantes.
Asovendedores mantuvo el optimismo durante los precarnavales, esperando que en la última semana las ventas mejoraran. Joaquín Cervantes manifestó que sectores como el hotelero y la oferta de palcos, siempre se destacan por sus cifras altas en ventas.
“El fenómeno de la inflación sigue afectando notoriamente las ventas alusivas al Carnaval en el centro de la ciudad, ya que las inversiones son altas y las utilidades son cada vez menores. Muchos de nuestros compañeros quedaron con mercancía para almacenar, pensando en el próximo Carnaval. Cabe resaltar que la venta de productos como el agua, las bebidas azucaradas y alcohólicas se mantuvo en niveles superiores”, afirmó Joaquín Cervantes.
Mencionó que las ventas bajas en la época de precarnaval y Carnaval suceden pocas veces, sin embargo, pide a la Alcaldía de Barranquilla, a la Gobernación del Atlántico y al Gobierno Nacional, la implementación de estrategias en los meses siguientes, que le permita al vendedor, sobre todo al reubicado, lograr una mayor estabilidad económica.