El gerente del Banco de la República, Leonardo Villar, le está recomendando al gobierno entrante analizar con cautela cuáles serán sus decisiones en materia de precios de la gasolina y no tomar decisiones apresuradas ya que podrían impactar la inflación.
Colombia ha mantenido los precios de la gasolina significativamente por debajo de los precios internacionales, lo que le costará más de 32 billones de pesos en déficit en el Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles. Según el Marco Fiscal de Mediano Plazo, entregado por el gobierno saliente, el país debería subir los precios de la gasolina en unos 400 pesos por mes para cerrar la brecha.
“¿Estamos aumentando el déficit fiscal? Sí, pero también es cierto que está mejorando la situación de Ecopetrol.
Las finanzas consolidadas no se están deteriorando. Paradójicamente no es un problema fiscal tan grave visto en su conjunto y creo que hay que manejarlo con muchísima cautela, hay que verlo en todas sus dimensiones hacia futuro y no debe conducir a decisiones apresuradas”, dijo Villar.
Según el vocero del banco central, un incremento ‘fuerte’ en los precios de la gasolina en un momento como este haría más complejo el manejo de la inflación y puede conducir a procesos de indexación de la economía. Es decir, que la gente tome decisiones pensando que la inflación será mucho más alta que la meta oficial del 3%.
La inflación en Colombia llegó al 9.67 % en el último año y el Banco de la República ha subido sus tasas hasta el 7.5 % para tratar de controlar las expectativas.