Por: Yasher Bolívar Pérez
En una noche memorable en el Chase Center, Klay Thompson fue recibido entre ovaciones en su regreso a San Francisco como parte de los Dallas Mavericks, su nuevo equipo. Sin embargo, fue Stephen Curry quien cerró el espectáculo en su honor, anotando 12 puntos consecutivos en los minutos finales y asegurando la victoria de los Golden State Warriors por 120-117 sobre los Mavericks, en lo que marcó el inicio de la Copa NBA.
El encuentro comenzó con un toque emocional cuando Thompson, quien pasó 13 temporadas con los Warriors y fue clave en la obtención de cuatro campeonatos, recibió una cálida bienvenida de sus antiguos compañeros y de un público eufórico. Todos los empleados del equipo e incluso el mismo Curry, con quien formó una de las duplas más temidas de la liga, lo abrazaron al iniciar el juego, en una muestra de afecto que fue ovacionada por la afición. Thompson no defraudó en su regreso: anotó 22 puntos y encestó 6 de 12 triples, recordando a los espectadores por qué fue uno de los grandes tiradores de su generación.
No obstante, el cierre fue para Curry. Con su carismática energía, el base de los Warriors anotó 12 puntos seguidos en los últimos tres minutos, remontando una desventaja y asegurando la victoria para los de casa. Con 37 puntos en su cuenta personal, Curry mostró su icónica celebración de “buenas noches” tras su último triple, dando fin a una noche cargada de emociones. “Hoy dejamos todo en la cancha por una buena causa, por Klay, y logramos llevarnos el partido”, declaró Curry conmovido.
En Dallas, Thompson sigue reconstruyendo su carrera después de varias lesiones y agradeció la emotiva bienvenida en el Chase Center. “Fue un honor y un momento que nunca olvidaré”, dijo el escolta, quien también expresó su cariño por los aficionados de Golden State, quienes abarrotaron el estadio para honrarlo.
Este primer duelo de la Copa NBA no solo resaltó la unión de los excompañeros, sino que recordó al público la importancia de la lealtad y el respeto en una liga que, aunque intensa, también da lugar a momentos de profunda conexión y homenaje a sus jugadores más queridos.