Un lamentable episodio de intolerancia ensombrece el mundo del fútbol en Puerto Colombia, donde un árbitro ha denunciado ser víctima de una brutal golpiza por parte de padres de familia, después de un partido de fútbol infantil.
El incidente tuvo lugar en la cancha del Polideportivo de la Uniautónoma del Caribe, durante la semifinal de la Liga del Atlántico en la categoría 2009, enfrentando a las escuelas Fusión Caribe y Evolution Soccer. Según el relato de Andrés Ariza, el árbitro afectado, la violencia estalló entre aficionados de uno de los equipos, quienes manifestaron su inconformidad con las decisiones arbitrales.
La pelea, que involucró a decenas de padres de familia, jugadores y árbitros, se prolongó durante varios minutos en plena cancha, generando un ambiente caótico y de gran tensión. La situación solo se calmó cuando finalmente se logró dispersar a los implicados en el enfrentamiento.
Este lamentable suceso ha provocado indignación en la comunidad, ya que los espacios deportivos, especialmente los destinados a actividades infantiles, deberían ser lugares de recreación y sano esparcimiento en lugar de escenarios para actos violentos.
Las autoridades locales han tomado cartas en el asunto y están llevando a cabo una investigación exhaustiva para identificar a los responsables de la agresión. Se espera que se tomen medidas disciplinarias ejemplares para prevenir incidentes similares en el futuro y preservar la integridad de los eventos deportivos locales.