Denuncia Ciudadana desde el barrio Limoncito: Edificio en riesgo de colapso por construcción vecina
Habitantes del edificio Sagitario, ubicado en la Carrera 72 #86-135, en el barrio Limoncito al norte de Barranquilla, denuncian el inminente riesgo estructural que enfrentan sus viviendas a causa de una obra de construcción vecina, cuyo propietario ha ignorado durante dos años las advertencias y llamados de los residentes.
Según testimonios entregados por los afectados, las grietas comenzaron a aparecer desde el inicio de los trabajos liderados por el señor Atencio, dueño del proyecto contiguo, quien hasta la fecha no ha entablado diálogo ni ha brindado soluciones concretas a los múltiples daños ocasionados.
“Anoche, con el aguacero, el techo del segundo piso se comenzó a caer a pedazos. La señora Minerva, una adulta mayor que vive en el primer piso, casi resulta gravemente herida al momento del incidente. Tuvimos que llamar a la Policía esta mañana porque esto ya no da espera”, relató una de las denunciantes.
Los residentes aseguran que existe una demanda legal que ya falló a su favor, pero el señor Atencio sigue haciendo caso omiso. A pesar de tener un acta firmada por los vecinos desde hace dos años y numerosos testimonios, la situación persiste sin respuesta efectiva.
Las imágenes muestran un panorama alarmante: paredes agrietadas, escaleras inestables, bloques desmoronados y una estructura que amenaza con colapsar ante cualquier nuevo aguacero.
“Mi madre ya no puede bajar las escaleras. El riesgo es demasiado alto. Aquí hay personas de la tercera edad viviendo en condiciones que no se le desean a nadie. Esto es un llamado desesperado a la prensa y a las autoridades competentes”, añadió la denunciante.
Vecinos también acusan al constructor de recurrir a maniobras dilatorias y presuntos actos de corrupción para evitar sanciones: “Dicen que va a la Alcaldía y pasa dinero para que no lo molesten, mientras aquí estamos viviendo una pesadilla”.
Desde NoticiasBQ hacemos un llamado a las autoridades distritales, a la Oficina de Gestión del Riesgo, a Planeación y a la Secretaría de Control Urbano y Espacio Público, para que actúen de manera inmediata antes de que ocurra una tragedia mayor.