Muy joven entró a los estudios de cine romanos de Cinecittà para interpretar pequeños papeles y fue descubierta por el millonario productor estadounidense Howard Hughes.
La actriz italiana Gina Lollobrigida, diva de mediados del siglo XX, falleció este lunes a los 95 años, anunció con un tuit el ministro de Cultura de su país, Gennaro Sangiuliano.
La intérprete de Pan, amor y fantasía (1952), saltó a la fama por su belleza y participó en más de 60 filmes. Recientemente había sido operada en septiembre, tras haberse fracturado el fémur por una caída en su domicilio.
«Adiós a la diva de la gran pantalla, protagonista de más de medio siglo de historia del cine italiano. Su encanto es eterno. Ciao Lollo», tuiteó el ministro Sangiuliano.
Nacida el 4 de julio de 1927 en el pequeño pueblo de Subiaco, en el corazón de los Abruzos (centro de Italia), en una familia modesta, pasó casi toda su vida en Roma. En esta importante ciudad, Lollobrigida estudió Bellas Artes y encantó con su belleza.
Muy joven entró a los estudios de cine romanos de Cinecittà para interpretar pequeños papeles y fue descubierta por el millonario productor estadounidense Howard Hughes.
Tras una breve estancia en Hollywood, regresó a Roma para dar inicio a una carrera que la consagraría como una de las actrices más apreciadas del Viejo Continente.
En las décadas de 1950 y 1960, actuó con actores y directores de la talla de Frank Sinatra, Sean Connery, Marcello Mastroianni y Humphrey Bogart.
En el ambiente artístico, solía ser llamada como «Lollo». Ella había regresado desde principios de los años 1980 a sus primeros amores artísticos: la fotografía y sobre todo, la escultura.