El patrullero Cristian Juvenal Mora Parra, de 25 años, adscrito al Escuadrón Móvil de Carabineros (EMCAR) de la Policía Nacional, fue asesinado este sábado 26 de abril en un ataque armado perpetrado en la vereda Sitio Nuevo, en zona rural del municipio de La Apartada, departamento de Córdoba.
El hecho ocurrió alrededor del mediodía, cuando un grupo armado atacó a los uniformados con ráfagas de fusil. En el atentado resultaron heridos otros tres policías, quienes fueron trasladados de inmediato a centros médicos especializados en Montería, capital del departamento.
La noticia fue confirmada por el director general de la Policía Nacional, brigadier general Carlos Fernando Triana Beltrán, a través de su cuenta oficial en la red social X (antes Twitter). En su mensaje, el alto oficial calificó el ataque como una “acción demencial” y expresó su solidaridad con las familias de las víctimas, reafirmando el “inclaudicable compromiso institucional” de identificar, capturar y llevar ante la justicia a los responsables.
“Estos actos de barbarie que enlutan a Colombia y a su Policía son acciones desesperadas de grupos criminales en respuesta a los contundentes golpes propinados por la fuerza pública. Con el apoyo de la ciudadanía seguiremos a la ofensiva hasta desmantelarlos”, afirmó Triana Beltrán.
Ante la gravedad de los hechos, un equipo especial de investigación criminal e inteligencia asumió las pesquisas, con el objetivo de esclarecer rápidamente lo sucedido y capturar a los autores materiales e intelectuales del atentado.
El asesinato del patrullero Mora Parra se enmarca en el denominado “plan pistola” orquestado por estructuras criminales que operan en el departamento, en un intento por frenar las operaciones de la fuerza pública en la región.
La situación ha generado consternación en el país, en medio de un contexto de recrudecimiento de la violencia contra la fuerza pública en algunas zonas estratégicas del Caribe colombiano.