El Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam) informó sobre el estado actual de las alertas hidrometeorológicas en el país, advirtiendo sobre incendios forestales, posibles deslizamientos e inundaciones en distintas zonas. El pronóstico indica condiciones climáticas complejas y riesgos asociados, especialmente en regiones como el Caribe, la Andina y la Pacífica.
La meteoróloga Leidy Johanna Rodríguez Castro, en el informe emitido a las 5:00 a.m. de hoy, indicó que ocho municipios del país están en alerta amarilla por posibles incendios forestales. Entre las zonas de mayor riesgo están Caquetá, con tres municipios, Putumayo con dos, y los departamentos de Cundinamarca, Guaviare y Nariño, cada uno con un municipio bajo esta alerta.
La sequedad de la vegetación y el clima actual han incrementado la vulnerabilidad de estas áreas, en donde se recomienda extremar medidas preventivas para evitar que posibles conatos se transformen en incendios de mayor magnitud.
En cuanto a los deslizamientos de tierra, un total de 569 municipios presentan algún nivel de alerta. De estos, 81 municipios se encuentran en alerta roja, lo que señala un riesgo alto de deslizamientos, especialmente en zonas montañosas. Los departamentos más afectados son Antioquia, con 19 municipios en alerta roja; Chocó, con 13; y Meta, con 12. Estas regiones, por su orografía y las intensas precipitaciones recientes, enfrentan mayores probabilidades de sufrir deslizamientos, por lo que se ha recomendado a las autoridades locales implementar planes de contingencia.
El informe del Ideam también señala alertas hidrológicas en distintas áreas del país, principalmente en las cuencas de los ríos Magdalena y Cauca, donde se registran dos alertas rojas puntuales y una alerta roja en toda la zona. Además, en estas cuencas se cuentan 25 alertas naranjas y 27 alertas amarillas, lo que indica un alto riesgo de inundaciones y crecientes súbitas.
En el Caribe, se mantiene una alerta roja puntual y dos alertas rojas, junto con 27 alertas naranjas y seis amarillas. Estos indicadores subrayan la probabilidad de desbordamientos, especialmente en las regiones bajas y cercanas a los ríos, donde el aumento en los caudales podría provocar inundaciones que afectarían a comunidades cercanas.