Así lo dio a conocer la Presidencia de la República con la firma en las próximas horas de un decreto que le permite a los reclusos del país, beneficiados con detención domiciliaria, pagar por obtener un brazalete electrónico y abandonar las cárceles, como medida para descongestionarlas del hacinamiento actual, que se ubica en un 17.88 % con una sobrepoblación de 14.720 reclusos.
El decreto, dice que el Gobierno tendrá la obligación de entregar el brazalete cuando los reclusos demuestren que no cuentan con la capacidad económica.
Actualmente se presentan demoras u obstáculos para la entrega de los brazaletes, para lo cual se hace necesario que la falta de capacidad económica de las personas privadas de la libertad, no se constituya como obstáculo para el acceso a los sistemas de vigilancia electrónica“.
El brazalete se otorgará gratuitamente a los reclusos que no declaren renta y que demuestren que su núcleo familiar hace parte de los grupos A, B y C del sisbén, que se refieren a población en pobreza extrema, en pobreza moderada y en situación de vulnerabilidad.
Se cobrará el brazalete a los reclusos que declaren renta o que estén afiliados como cotizantes en el Sistema de Seguridad Social en Salud.