En un acto especial que contará con la presencia de sobrevivientes y víctimas de la violencia policial y congresistas de distintas bancadas, será radicado este jueves en el Congreso de la República un proyecto de reforma a la Policía Nacional, estructurado en un trabajo realizado en las calles desde enero de este año, que vinculó alrededor de 40 organizaciones y que recibió más de 200 comentarios y anotaciones, a través de redes sociales y unos 30 eventos virtuales y presenciales.
Según los promotores, la enmienda fue «construida a muchas manos a manera de wikiley» y cuenta con el respaldo de casi 70 mil firmas recogidas digitalmente y en talleres en territorio.
«Luego de 9 meses de trabajo con 32 organizaciones sociales y más de 80.000 ciudadanos/as, este 9 de septiembre radicaremos al Congreso de la República el mandato de una Reforma Ciudadana a la Policía», indicó el concejal de Bogotá, Diego Cancino, uno de los impulsadores de la reforma.
Además precisó que “esta reforma ciudadana tiene como ejes fundamentales garantizar una policía para la paz, una policía digna y que dignifique a través de la educación, la profesionalización y la promoción democrática de sus miembros. Buscamos fortalecer la transparencia institucional, que la policía sea cercana a la gente y sus comunidades, que garantice la vida e integridad de las personas y que quienes cometan errores sean juzgados por la justicia ordinaria, pedimos que se desmonte el ESMAD”.
Añadió que las propuestas fueron discutidas con líderes, lideresas, organizaciones de derechos humanos, sobrevivientes, familiares de víctimas, pero sobre todo jóvenes y estudiantes con miras a tener una policía para la paz, que mejoren la legitimidad institucional, fortalezcan la confianza y mejoren las condiciones de los miembros de la Policía Nacional.
De acuerdo con los promotores de la reforma, la principal acción para mejorar la seguridad en la ciudad es acabar con la corrupción en la Policía, que pasó del 29 al 43% y mejorar el servicio de policía que el 70% de encuestados considera malo.
Organizaciones de derechos humanos indican que durante los tres meses de movilizaciones de este año, el país registró 87 homicidios, 28 de los cuales son presuntamente atribuibles a la fuerza pública y casi dos mil personas (1.905) han sido heridas por las acciones del Escuadrón Móvil Antidisturbios (88 casos de lesiones oculares y 115 personas heridas por armas de fuego). (Campaña Defender la Libertad, 28 de abril al 21 de julio de 2021).
Las agresiones contra defensores de derechos humanos y la prensa van en aumento: 325 defensores agredidos. Así como las denuncias de abuso de autoridad (1603) y las detenciones arbitrarias (3365). Hay reportes de 10 personas que siguen desaparecidas en Bogotá.
Según la Fundación para la Libertad de Prensa (FLIP) en sólo dos meses del paro nacional (mayo – junio) se documentaron 260 casos y un total de 299 víctimas de agresiones contra la prensa. En el 58% (152) de los casos, el agresor fue identificado como un integrante de la fuerza pública.
Carolina Ordoñez del colectivo Rosa Negra y vocera de las víctimas del incendio del CAI de Soacha, aseguró: “La reforma ciudadana a la policía que hemos acompañado es muy importante, tenemos que construir un nuevo pacto con una policía más democrática y solidaria. Desde mi voz como víctima como madre, queremos un cambio hacia una institución garante de la vida, de los derechos humanos, una policía tolerante, empática y al servicio de la comunidad. Las víctimas queremos justicia, verdad y garantías de no repetición. Tenemos que entender que todos somos hijos y hermanos de un mismo país”.