La gobernadora del Chocó, en un fuerte pronunciamiento, pidió al presidente Gustavo Petro atención urgente ante la crisis humanitaria que afecta al departamento. “Jamás había visto las vías de mi territorio selladas con banderas y cilindros bomba”, expresó, denunciando el incremento de bloqueos y violencia en la región. Exigió medidas efectivas para garantizar la seguridad y el bienestar de los chocoanos.
En el marco de la Cumbre de Gobernadores, la mandataria del Chocó, Nubia Carolina Córdoba, hizo un llamado urgente al Gobierno Nacional para atender la grave crisis humanitaria y de seguridad que enfrenta su departamento. La gobernadora alertó sobre los constantes bloqueos, la presencia de grupos armados ilegales y la creciente violencia que mantiene a varias comunidades confinadas, impidiendo su acceso a bienes básicos y movilidad.
“Como gobernadores hemos insistido en que en varias regiones del país la ciudadanía está siendo violentada en sus derechos. En los últimos días hemos enfrentado una grave situación de orden público en el Chocó. Hay bloqueos en las dos únicas vías que comunican el departamento con el centro del país, y grupos armados han instalado artefactos explosivos que ponen en riesgo la vida de la población. La economía de nuestro departamento está prácticamente paralizada, y entendemos que otras regiones del país también enfrentan dificultades, pero necesitamos una estrategia excepcional para atender esta crisis”, advirtió la gobernadora.
Crisis de movilidad y control territorial
Córdoba denunció que el Chocó vive una emergencia prolongada, con más de dos años de paros armados, bloqueos y enfrentamientos entre grupos ilegales como el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y el Clan del Golfo, que ejercen control territorial y afectan la vida cotidiana de la población.
“Cuando el único medio de transporte es fluvial y está controlado por grupos armados, cuando la minería ilegal y otras economías ilícitas son las únicas opciones de subsistencia para muchas comunidades, es evidente que no podemos seguir operando de manera ordinaria. Necesitamos una respuesta excepcional del Gobierno Nacional”, enfatizó.
La gobernadora explicó que la crisis de movilidad en el Chocó no solo afecta la conexión terrestre con el centro del país, sino que también impide la navegación segura en los ríos, donde grupos armados imponen retenes y ejercen violencia contra la población.
“¿Qué pasa con un territorio cuando durante dos años solo ha conocido paros armados? ¿Qué pasa cuando el transporte solo es fluvial y no puede transitar por los ríos? ¿Qué pasa cuando cada intento de movilización se encuentra con un retén del ELN o del Clan del Golfo?”, cuestionó Córdoba.
Afectaciones humanitarias
La gobernadora también alertó sobre la grave crisis humanitaria que afecta a los habitantes del departamento, especialmente en comunidades indígenas y afrodescendientes que han quedado atrapadas en medio del conflicto.
“No solo se trata del impacto en la movilidad o la economía, sino del daño profundo que se está causando a nuestras comunidades. En los últimos días, hemos tenido reportes de combates prolongados en la cuenca media del río San Juan, la desaparición de un gobernador indígena y la instalación de artefactos explosivos en varias vías. Esto ha generado un confinamiento casi total en regiones como San Juan y Atrato”, manifestó.
Además, Córdoba enfatizó que la presencia de artefactos explosivos y francotiradores en los territorios está poniendo en grave riesgo a la población civil. “Hemos tratado de que la ciudadanía no esté cerca de estos objetos, pero la situación es crítica. Hace apenas 15 días, un artefacto explotó y asesinó a un policía con un francotirador. La gente vive con miedo, con zozobra, sin garantías de seguridad”, aseguró.
El llamado a garantizar derechos básicos
La mandataria del Chocó insistió en la necesidad de fortalecer el proceso de paz y garantizar que no se atente contra la población civil. “La paz no puede fracasar en un país como Colombia. No podemos permitir que se siga atentando contra la ciudadanía ni transgrediendo el Derecho Internacional Humanitario. Si se plantea un cese al fuego con la Fuerza Pública, con mayor razón debe garantizarse el respeto a la vida y la integridad de la población civil”, enfatizó.
Sobre las negociaciones con grupos armados, Córdoba recordó que actualmente hay múltiples actores con dinámicas diferentes. “En el departamento del Chocó hay presencia del ELN, que hoy al parecer ya no tiene un proceso de paz en marcha; del Clan del Golfo, que apenas está iniciando un proceso; y de estructuras criminales urbanas que han planteado la posibilidad de una paz urbana. Pero la pregunta es: ¿qué sigue? ¿Qué alternativas existen para que estos grupos dejen las armas y se reintegren a la sociedad? No podemos seguir esperando indefinidamente mientras nuestra gente sigue sufriendo”, advirtió.
La gobernadora también insistió en que el Gobierno debe implementar estrategias de inversión que ofrezcan alternativas económicas legítimas a las comunidades. “No se trata solo de control territorial con la Fuerza Pública. Se necesita inversión social. ¿Qué pasa con una región que solo sobrevive de economías ilegales porque no hay oportunidades reales de desarrollo? Es urgente que el Estado llegue con soluciones estructurales”, dijo.
Pendiente con el presidente Petro
Córdoba señaló que, aunque aún no ha podido hablar directamente con el presidente Gustavo Petro, ha mantenido comunicación con funcionarios del Gobierno encargados de la asistencia social y la atención en emergencias.
“Llevaremos esta problemática al Presidente de la República y a su equipo de gobierno. No podemos permitir que nuestra población siga en esta situación de confinamiento y zozobra”, afirmó.
Por último, la mandataria reiteró que, si bien el Chocó no ha registrado víctimas mortales en los últimos días, la crisis persiste y el temor entre la población es latente. “Afortunadamente, no hemos tenido muertos ni heridos en la última semana, pero los combates continúan. Hemos recibido denuncias de la comunidad sobre desapariciones y desplazamientos forzados. Hay artefactos explosivos en las vías y el miedo al confinamiento es cada vez mayor. La situación no da espera”, concluyó.