El costo del kilovatio hora no podrá aumentar en las facturas de energía eléctrica en lo que resta del año, de acuerdo con lo establecido en la Resolución 152 de la Comisión de Regulación de Energía y Gas (CREG), expedida en el marco de la emergencia por el COVID-19.
Sin embargo, esto no significa que no se puedan presentar aumentos en las facturas de energía eléctrica asociados a un mayor consumo o a otros cobros no relacionados con este servicio.
“Las familias colombianas están el centro de nuestra política de atención de la emergencia del COVID-19 y por eso, desde el primer momento, hemos generado diferentes alivios para que sigan contando con los servicios públicos de energía y gas, esenciales en nuestra vida diaria”, aseguró el Ministro de Minas y Energía, Diego Mesa.
La CREG también otorgó dos meses adicionales de gracia para que los usuarios residenciales de los estratos del 1 al 4 comiencen a realizar el primer pago de cada factura de energía eléctrica y gas combustible por redes que hayan diferido durante la emergencia por la pandemia del coronavirus. Esto significa que en total cuentan con un periodo de gracia de 4 meses.
De este modo, en agosto se cobrará la primera cuota de los recibos correspondientes al ciclo de facturación de abril, en septiembre la primera cuota del ciclo de mayo, en octubre la primera cuota del ciclo de junio y en noviembre la primera cuota del ciclo de julio.
Los usuarios de estratos 1 y 2 podían diferir hasta por un plazo de 36 meses el costo del consumo básico o de subsistencia que no es subsidiado, sin recargo adicional. Mientras que los de estrato 3 y 4 tenían la opción de hacer este diferimiento en un plazo de 24 meses, con una tasa preferencial.
Actualmente, más de 12 millones de familias, que representan un 85% de la totalidad de los usuarios residenciales del país, reciben subsidios para el servicio de energía eléctrica. En el estrato 1 este beneficio cubre un 60% del consumo de subsistencia, un 50% para el estrato 2 y un 15% del consumo de subsistencia para estrato 3.
En gas combustible por redes, los usuarios residenciales de estrato 1 reciben un subsidio de hasta el 60%, mientras que para los de estrato 2 el beneficio es de hasta el 50%.