La noche del jueves se vio interrumpida por una potente explosión en el centro del municipio de La Plata, Huila, tras la detonación de una motobomba a escasos metros de la estación de Policía.
El ataque dejó al menos dos personas muertas y otras 25 heridas, según reportes preliminares de las autoridades.
El estallido, que ocurrió alrededor de las 8:30 p.m., generó pánico entre los habitantes del sector. La onda expansiva rompió vidrios, afectó vehículos cercanos y desató una nube de humo y llamas que cubrió varias calles del casco urbano.
“Escuchamos el estallido y salimos corriendo. Había gritos, gente tirada en el suelo, sangre… Fue horrible”, relató una comerciante de la zona, aún conmocionada por la escena.
Organismos de socorro y ambulancias acudieron rápidamente al lugar para atender a los heridos, quienes fueron trasladados al hospital San Antonio de Pauda. Algunos presentan lesiones de gravedad y permanecen bajo observación médica.
El sitio del atentado fue acordonado por unidades de la Policía Nacional y el Ejército, mientras equipos antiexplosivos inspeccionan la zona en busca de otros artefactos. Hasta el momento no se ha atribuido oficialmente la autoría del ataque, aunque las autoridades investigan posibles vínculos con grupos armados ilegales que operan en la región.
La explosión ha generado consternación entre los habitantes del municipio y reaviva temores en una zona que, pese a algunos años de relativa tranquilidad, sigue siendo vulnerable por su ubicación estratégica en el suroccidente colombiano.
El gobernador del Huila, Rodrigo Villalba, condenó el atentado y convocó un consejo de seguridad urgente para evaluar la situación y fortalecer las medidas de protección en la región.