Garantizar las comidas a quienes viven en la calle y a los que la dejaron es el desafío diario del Distrito. En el Centro de Acogida Día y en el Hogar de Paso se les asegura una alimentación sana. Así funciona esta cadena.
Cuando a Evelio Valencia le hablan de segundas oportunidades sus ojos se iluminan. Después de 30 años de vivir en la calle en las peores circunstancias, alimentándose de migajas que encontraba en la basura y durmiendo en cualquier banca o andén, ahora puede comer en una mesa con alimentos escogidos por expertos para lograr la buena nutrición de los comensales.
Evelio llora de la felicidad. Tiene un plato de comida en la mesa del Centro de Acogida Día (donde viven los ex habitantes de la calle), una cama y, además, estudia inglés.
“Dormía en cartón, comía poco, sufría las inclemencias del clima, a veces mucho calor, a veces en invierno dormía con la ropa mojada. Llegué en unas condiciones deplorables, no me podía sostener en pie, no podía dar un paso con firmeza, con seguridad, podía caerme. Estaba físicamente en huesos, antes era solo venas, ahora es que tengo carnitas”, narra Evelio.
Él quizá no lo sepa con suficiencia, pero pudo recuperar su peso y ganar “carnitas” -así como lo han hecho decenas de sus compañeros y también los beneficiarios del Hogar de Paso- gracias a toda la logística a cargo de la Secretaría de Gestión Social del Distrito que permite tener todos los días comidas balanceadas con gran componente nutricional y de exquisito sabor, en la mesa en la que se sientan Evelio y sus compañeros.
Este programa hace parte del compromiso institucional de la Alcaldía de Barranquilla para garantizar la seguridad alimentaria a poblaciones vulnerables, que por esa misma condición son prioritarias para la administración del alcalde Jaime Pumarejo.
Así comienza el proceso
El proceso de seguridad alimentaria de habitantes y ex habitantes de la calle comienza cada semana con la compra de los alimentos en los mercados públicos de Barraquilla. Este proceso parte de una minuta, en la que ya están previamente estandarizadas las necesidades nutricionales de esta población.
Cuando los alimentos llegan al Hogar de Paso o al Centro de Acogida son lavados, clasificados y refrigerados de manera inmediata para conservar su buen estado. La preparación se lleva a cabo con toda la asepsia y normas de manipulación de alimentos por parte del personal encargado.
Desde los contenedores, donde se encuentran reservados los alimentos (carbohidratos, proteína como pollo, carne o pescado, más la ensalada de frutas y jugo) sacan las cantidades y se hace entrega a los beneficiarios de su ración.
Pero el proceso de seguridad alimentaria para habitantes y ex habitantes de la calle va más allá. Incluye charlas educativas para la transformación de hábitos nutricionales, valoraciones y seguimiento.
Bienestar garantizado
En este 2021, el Centro de Acogida Día ha beneficiado a 1.000 habitantes de la calle. Entre ellos, además de Evelio, se encuentra Richard Palacios, quien después de muchos años de permanecer en la calle y de consumir drogas llegó a este lugar, según él, “vuelto nada”, sin muchas esperanzas, pero se encontró con un verdadero milagro que hoy lo tiene lleno de vida.
“Aquí me brindaron una oportunidad, la primera en mucho tiempo, tenía años que no me bañaba con agua limpia, con jabón, champú, ahora lo hago, lavo mi ropa, tengo buena comida. Esto no se ve todos los días, no sé cómo expresarme, quiero llorar de la emoción, señor. Gracias, estoy feliz de la vida”, cuenta Palacios.
En este lugar le garantizan alimentación 100% a esta población de lunes a viernes, dentro del programa Habitantes de Calle, que trabaja en la recuperación e inclusión social de esta población, lo cual incluye una oferta de servicios, entre ellas, la seguridad alimentaria.
Para el secretario de Gestión Social, Santiago Vásquez, la visión del alcalde Pumarejo es garantizar que aquellos que han vivido duras circunstancias en la vida tengan la mano del Distrito, con lugares en los que no solamente pueden asearse, sino alimentarse diariamente de una manera sana, balanceada y suficiente para el desarrollo de sus funciones. “Conocemos las condiciones a las que están expuestos en las calles, por eso, desde los proyectos del programa Habitantes de Calle pensamos en su bienestar, pensamos en darles lo mejor”, asegura el funcionario.
En el Plan de Desarrollo 2020-2023 ‘Soy Barranquilla’ se encuentra el programa Habitantes de la Calle, el cual busca garantizar la protección, restablecimiento de los derechos e inclusión social de las personas habitantes de la calle, mediante acciones intersectoriales que prevengan la vida en la calle, haciendo una mitigación, reducción y superación del daño ocasionado por esta opción de vida.
La coordinadora del programa, Luisa Mora, considera que el trato hacia estas personas es lo que ha logrado que muchos de ellos encuentren una segunda oportunidad.
“Desde el programa Habitantes de Calle, a través del proyecto Centro de Acogida Día, se les asegura una alimentación sana, que brinda los nutrientes necesarios para cada uno de ellos, cambiar los malos hábitos alimenticios, además de enseñarles la importancia de un buen baño y de cepillarse bien los dientes, un trabajo coordinado que contempla mejorar su calidad de vida”, indica.