Con una ejecución del 38 por ciento en las obras del muelle y un 35 por ciento de las obras de la plaza, avanzan en Puerto Colombia los dos grandes proyectos que impulsarán el turismo y el disfrute del espacio público en este municipio de la zona costera del Atlántico y que son pieza fundamental en la implementación del pacto por el turismo del departamento.
En una visita de inspección, la gobernadora del Atlántico, Elsa Noguera, verificó la ejecución de las obras “que nos tienen a todos soñando” y que están compuestas por la remodelación de la plaza principal y la recuperación de 200 metros del histórico muelle.
“A la fecha, las obras avanzan a buen ritmo y de acuerdo con el cronograma establecido. El ensamble del muelle avanza en un 38 por ciento y se realizó el montaje de cinco pilotes hincados, de los 62 que llegaron procedentes de China en diciembre. También están listos cuatro pilotes vibrados, tres capiteles instalados y el 54 por ciento de los elementos prefabricados”, explicó la mandataria departamental.
Noguera agregó que las obras del emblemático muelle de Puerto Colombia, por donde llegaron miles de inmigrantes e ingresó el progreso y la modernidad al país, “estarán listas en agosto de este año, para convertirse nuevamente en un destino turístico nacional”, señaló.
En cuanto a la plaza, las obras se ejecutan en cinco frentes de trabajo y actualmente el avance es del 35 por ciento. “De acuerdo con el cronograma, esperamos entregar la plaza renovada a finales de septiembre de este año, para la recreación, el disfrute al aire libre y la sana convivencia”, afirmó la Gobernadora.
La plaza y el muelle se integrarán a través de un malecón de 325 metros de longitud con vista al mar, que se sumará a un complejo turístico compuesto por un malecón ampliado y una playa ordenada, todo dispuesto para ofrecer turismo familiar, exquisita gastronomía y deportes náuticos.
“Este es un sueño que forma parte del Gran Pacto por el Turismo del Atlántico y que haremos realidad”, sostuvo Elsa Noguera.
El pacto por el Turismo es una estrategia que se implementa en coordinación con el Departamento Nacional de Planeación – DNP y Presidencia de la República que permite realizar inversiones en infraestructura para potencializar la oferta turística como polo de crecimiento y la generación empleo e ingresos a las comunidades locales.