El procurador delegado ante la Jurisdicción Especial de Paz, Jairo Acosta, se refirió al informe que concluyó que la extinta guerrilla de las Far incurrió en el crimen de lesa humanidad de esclavitud con las personas que estuvieron secuestradas.
“Estos informes, que son muchos, nos entregaron nociones exactas de que había habido unos tratos, que a la luz del Derecho Internacional Humanitario, suponen la trata de personas y la antigua esclavitud”, dijo Acosta.
Indicó que las Farc comercializaron a las víctimas de secuestros y la manera cómo estos se ejecutaron: “Una persona era secuestrada por un delincuente común y luego era negociada y objeto de una transacción”.
Agregó que a muchas de las víctimas se les obligó a trabajos forzados en los campamentos y hasta fueron sometidas a vejámenes sexuales.
“Generalmente tenía que ver con esas obras, obligaciones que imponían a quienes eran retenidos para que ejecutaran trabajos que no correspondían con su condición de retenidos”, explicó.
Este fin de semana, los miembros del secretariado de la extinta guerrilla se pronunciaron sobre el informe guerrilla y negaron, rotundamente, que hubieran incurrido en estas actuaciones.