A pesar que en lo corrido del mes de septiembre, se registró en el país una disminución de contagios y de muertes a causa del COVID-19, después de un tercer pico que diariamente dejaba más de 600 fallecimientos en todo el país. Ahora, el Gobierno está pasando de página, de acuerdo con las cifras, y prevé que para el próximo año se tendrá que trabajar en controlar el virus de manera habitual, como otros tipos de enfermedades respiratorias.
“Lo que esperamos es que sea una endemia de bajo impacto, esto en términos de salud pública quiere decir que el comportamiento que tenga para una región dada, a lo largo de los años, se presente dentro de unos niveles aceptables (…) El gran desafío que tenemos es discutir qué es un nivel aceptable. La aparición de nuevas variantes hace que, incluso con altas coberturas de vacunación, pensar en un cero COVID es técnicamente, si no imposible, sí muy difícil, al menos a corto y mediano plazo”, mencionó Julián Fernández, director de Epidemiología y Demografía del Ministerio de Salud.
De acuerdo con el Ministerio, se hace necesaria la continuidad de algunas medidas de autocuidado, que sirven para prevenir otras enfermedades respiratorias, como permitir la circulación de aire en espacios cerrados, el uso de tapabocas en personas que sufran este tipo de enfermedades, e incluso implementar aislamientos para evitar más contagios en el país.
La fórmula más efectiva es la que le apuesta el Gobierno con la vacunación a más de 35 millones de personas para poder controlar el virus y la presencia o aparición de nuevas variantes en los próximos meses. El Ministerio de Salud ha otorgado relajamiento de medidas sociales en esas ciudades que implementen la vacunación y tengan una población inmunizada. Ya ocho ciudades, entre ellas Bogotá, están permitiendo aforos cercanos al 75 % en espacios públicos.
“Este virus nos ha enseñado a ser prudentes con respecto a los pronósticos. Varios expertos internacionales coinciden de que, probablemente, hacia finales del año y principios del próximo año, los mayores impactos en salud pública de la pandemia se van a disminuir, es decir, esperamos que se siga disminuyendo en Colombia, ya lo estamos observando, el número de muertes, el número de hospitalizaciones, incluso, en menor medida, la incidencia”, expuso Fernández.
La importancia sigue siendo esa búsqueda activa de las personas que aún no se han vacunado, especialmente los mayores de 50 años, para continuar con el pronóstico del Ministerio de que el cuarto pico de contagios puede ser evitable con la vacunación.