Luego de la elección del vicepresidente del Senado de la República ayer martes, el proceso avanza en la Comisión de Ética del Senado, por presuntamente haber incurrido en una falta disciplinaria.
Tras dos años de ocurrido el famoso caso de la “jugadita” protagonizada por el senador Ernesto Macías cuando fue presidente del Congreso, en una hecho que fue considerado por varios sectores como una estrategia para torpedear el discurso de la oposición durante el 20 de julio de 2019.
El hecho fue objeto de demandas disciplinarias y en principio se comenzaron a adelantar investigaciones en la Procuraduría General de la Nación, pero el Consejo de Estado determinó, después de resolver la colisión de competencias, que debía ser la Comisión de Ética del Senado la encargada de llevar el proceso, tras ser una conducta cometida en el ejercicio de sus funciones congresionales.
Se conoció por allegados a la Comisión de Ética que el caso de la “jugadita” sí está avanzando y hace poco le formularon pliego de cargos al senador Macías, luego de que el instructor del caso, Miguel Ángel Pinto, considerara que sí pudo haberse configurado una falta disciplinaria.
Así mismo señalan que durante la investigación se decretaron pruebas, se tomaron declaraciones, se pidieron las grabaciones del día de los hechos y con base en esa información es que el ponente decidió formular cargos. A Macías se le dio la posibilidad de hacer una contestación en la que pudo haber solicitado más pruebas, pero hasta el momento no se conocen detalles de la misma.
Terminada la etapa del proceso, el senador Pinto tendrá que elaborar una ponencia en la cual pediría que se sancione a Macías por supuestamente haber incurrido en una falta con la oposición durante el acto de instalación del Congreso, en donde debía ofrecerle todas las garantías a la oposición.
Sin embargo, el tema no es para alarmarse, ya que según quedó establecido en el proceso y en el pliego de cargos, Macías habría incurrido presuntamente en una falta leve, lo cual solo le representaría una “amonestación escrita y privada” ante el pleno de la Comisión de Ética, según indica la ley 1828 del 2017, que es el Código de Ética y Disciplinario del Congreso.
Si su falta hubiese sido catalogada como grave o gravísima, se hubiera expuesto incluso a la suspensión de su ejercicio congresional, pero este no será el caso.
En el documento que sustenta el pliego de cargos y que fue conocido por RCN Radio, se argumenta que pudo haberse presentado una “transgresión al deber consagrado en el literal C del artículo 8” de la ley anteriormente mencionada y una posible violación del “principio de integridad” del congresista previsto en la misma norma.
En ese sentido, se espera que el proceso continúe su trámite en la Comisión de Ética y esta misma corporación tome una decisión con respecto al caso de la “jugadita”, contra la oposición determinando si Ernesto Macías debe recibir o no una sanción por esta conducta que ha sido catalogada como leve.
Este 20 de julio de 2021, el presidente Iván Duque no escuchó el discurso de réplica de la oposición y delegó al ministro del Interior, Daniel Palacios, para cumplir esa función, lo cual también ha sido catalogado como una ‘jugadita’ del expresidente del Senado, Arturo Char, quien pidió a una comisión de congresistas acompañar al mandatario de regreso a la Casa de Nariño, antes de que las bancadas alternativas pudieran intervenir.
#NoticiasBQ
#Compartir
D.A.