Virginia Giuffre, la mujer que denunció al príncipe Andrés y al empresario Jeffrey Epstein por abuso sexual, falleció este viernes en Neergabby, Australia, donde residía desde hace varios años. Su familia confirmó que Giuffre, de 41 años, se quitó la vida, señalando que “el peso del abuso fue insoportable”.
Nacida en Sacramento, California, Giuffre se convirtió en una de las principales voces en la lucha contra la explotación sexual y fue pieza clave en los procesos judiciales contra Epstein y su círculo cercano. Su testimonio fue determinante en la condena a 20 años de prisión de Ghislaine Maxwell, quien fue hallada culpable de tráfico sexual de menores para el empresario.
En 2021, Giuffre presentó una demanda civil acusando al príncipe Andrés de haber abusado de ella en al menos tres ocasiones cuando tenía 17 años, a cambio de 15.000 dólares, bajo presión de Epstein.
En un emotivo comunicado, su familia la describió como una “heroína” y una “guerrera” en la lucha contra el abuso. “Virginia será recordada por su increíble coraje. Sus tres hijos eran la luz de su vida y su motor para enfrentar a quienes la dañaron”, señalaron.
La noticia de su muerte ha generado conmoción internacional y ha reavivado el debate sobre el impacto emocional que enfrentan las víctimas de abuso sexual.