Por: Yasher Bolívar Pérez
El pívot serbio Nikola Jokic protagonizó una actuación histórica en la victoria de los Denver Nuggets sobre los Phoenix Suns (149-141). Con 31 puntos, 21 rebotes y 22 asistencias, se convirtió en el primer jugador en la historia de la NBA en alcanzar un triple-doble con esas cifras, consolidando aún más su legado en la liga.
A pesar del esfuerzo de Kevin Durant y Devin Booker, que llevaron el partido a tiempo extra con una remontada espectacular, Jokic y su equipo supieron responder en el momento clave. Su entrenador, Michael Malone, lo calificó como “único”, mientras que Durant reconoció su grandeza: “Es un gran hombre de todos los tiempos”.
Con esta hazaña, Jokic fortalece su candidatura al MVP de la temporada y sigue sumando hitos a su carrera. Los Nuggets, con un récord de 41-22, ahora se preparan para enfrentar a Oklahoma City Thunder en su lucha por la cima del Oeste.