Alejandro Ordóñez, embajador de Colombia ante la Organización de los Estados Americanos (OEA), fue contundente en su intervención en pleno del Consejo Permanente al defender a la Policía en su intervención desde el comienzo de las manifestaciones, al tiempo que aseguró que existe una agenda de “crimen transnacional” que trata de desestabilizar a la nación.
Ordeños insiste en que las protestas están siendo infiltradas por grupos ilegales como el ELN o las disidencias de las Farc promoviendo el vandalismo y que hay personas tratando de sacar réditos políticos con “cada víctima” y dijo que “De esta violencia hacen parte organizaciones terroristas ligadas al narcotráfico, ligadas al ELN o disidencias de las Farc. Lo mismo ocurre con agitadores profesionales, antiguos criminales que hoy obran como patriarcas de la anarquía y buscan réditos políticos en cada víctima y en cada jornada del caos”.
Señaló también que hay sectores tratando de deslegitimar injustamente al ejecutivo colombiano presentándolo como “violador de los derechos humanos” ante los organismos internacionales, buscando “permear con su discurso” los informes que se producen sobre el país.
“Desconocen que la institucionalidad colombiana ha salido airosa de otros intentos de desprestigio, desconocen que nuestro pueblo respeta y agradece la acción de su Policía y de sus Fuerzas Militares (…) el Estado tiene obligaciones y no quiere tolerar la violencia ni claudicar ante quienes la ejecutan.”
El embajador indicó que todo aquel que incurra en vandalismo será “investigado y sancionado”, criticó la falta de rigurosidad (a su juicio) en las redes sociales y usó como ejemplo ante el Consejo Permanente el caso en el que una mujer perdió a su bebé en Cundinamarca, porque los manifestantes que bloqueaban la vía no dejaron que pasara la ambulancia en donde se transportaba.
D.A.