En un reciente discurso, Donald Trump, quien asumió la presidencia de Estados Unidos el 20 de enero, anunció que una de las primeras medidas de su gobierno será eliminar lo que describió como la “locura transgénero”. Según sus declaraciones, su administración tomará decisiones contundentes para mantener a los hombres fuera de los deportes femeninos y establecerá como política oficial que solo existen dos géneros: masculino y femenino.
Trump también aseguró que pondrá fin a la teoría crítica de la raza y a la inclusión de temas relacionados con la identidad de género en las escuelas, comprometiéndose a retirar rápidamente estos contenidos del sistema educativo. Su postura generó reacciones diversas en el ámbito político y social, con seguidores aplaudiendo la decisión, mientras que críticos advierten sobre los posibles impactos en los derechos de la comunidad transgénero y en la educación en Estados Unidos.