En una reciente declaración, el presidente electo de los Estados Unidos, Donald Trump, sorprendió a sus seguidores al proponer un cambio significativo en la geografía de América. Durante un evento público, Trump sugirió que el Golfo de México, una de las principales formaciones geográficas de la región, debería ser renombrado como “Golfo de América”.
“Vamos a cambiar el nombre del Golfo de México a Golfo de América, qué hermoso nombre”, expresó Trump ante su audiencia, generando tanto apoyo como controversia en las redes sociales y entre expertos en geografía. Según el presidente electo, este cambio reflejaría mejor el vínculo y la importancia que tiene el golfo para todos los países de América, no solo para México.
El Golfo de México, que ha sido reconocido con ese nombre durante siglos, abarca territorios de varios países, incluyendo Estados Unidos, México y Cuba. A lo largo de la historia, ha sido un importante punto de comercio, navegación y ecología. Sin embargo, la propuesta de Trump ha provocado reacciones mixtas, con algunos criticando la idea como una forma de borrar parte de la identidad histórica de la región.
En la conferencia desde su residencia en Mar-a-Lago, el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, también se pronunció sobre las relaciones bilaterales con México, Canadá y Panamá y además adelantó propuestas controvertidas antes de asumir oficialmente la presidencia.
Críticas a la seguridad en México
Trump criticó a México, describiéndolo como un país en manos de los cárteles. “Tenemos un déficit con México. Y les ayudamos mucho. Esencialmente, están dirigidos por los cárteles. No puedo dejar que eso ocurra. México está realmente en problemas, muchos problemas. Es un lugar muy peligroso”.
A pesar de la controversia, el presidente electo mantiene que el renombramiento fortalecería la unidad entre los países de América, proponiendo un cambio simbólico para representar el “orgullo y la grandeza” de la región.
El futuro de esta propuesta aún está por verse, ya que los cambios geográficos oficiales requieren de acuerdos internacionales y una extensa discusión. Sin embargo, la declaración de Trump ha encendido un debate sobre el valor histórico de los nombres geográficos y las implicaciones de su alteración.
Tensión con Canadá y Panamá
De igual manera, el presidente electo criticó a Canadá, acusando al país de depender del ejército estadounidense: “Está bien, pero van a tener que pagar por ello”. Incluso, recordó su idea previa de anexar a Canadá como parte de Estados Unidos, lo que calificó como plausible. En este sentido, mencionó haber propuesto al famoso exjugador de hockey Wayne Gretzky postularse como primer ministro en lugar de Justin Trudeau, a quien calificó indirectamente como un líder ineficiente. “Le dije: ‘preséntate a primer ministro. Ganarás. Tardarás dos segundos’”.
Trump también advirtió sobre posibles tensiones con Panamá, al expresar su intención de recuperar el control del Canal de Panamá. En palabras de Trump, citadas por Reuters, “China básicamente está tomando el control” del territorio y acusó a Panamá de imponer tarifas excesivas a los barcos estadounidenses que transitan esa vía estratégica. Ante la pregunta de si descartaría usar coerción militar o económica para lograr este objetivo, el mandatario electo respondió rotundamente: “No, no puedo asegurarle ninguna de esas dos cosas; pero puedo decir esto, los necesitamos para la seguridad económica”.
Aunque estas declaraciones han despertado reacciones, su equipo no ha precisado detalles específicos ni planes inmediatos para llevar a cabo dichas propuestas, reporta EFE.
Para finalizar, cabe recordar que, según Reuters, esta conferencia se desarrolla en medio de importantes retos internacionales y apenas días antes de que Trump asuma formalmente su mandato el próximo 20 de enero. Esta fecha marcará el inicio de lo que el propio presidente electo ha denominado una “época de oro” para Estados Unidos, aunque sus declaraciones dejan en claro que su gestión no estará exenta de tensiones diplomáticas.
Fue certificado por el Congreso hace 24 horas
El lunes por la tarde, la vicepresidenta en funciones, Kamala Harris, presidió una sesión conjunta del Congreso de Estados Unidos en el Capitolio, en la que se certificó la victoria electoral del republicano.
Durante el evento, los legisladores presentaron las actas estatales con las que se certificaron los 312 votos electorales con los que Trump regresará a la Casa Blanca por un segundo mandato y se convertirá en el presidente 47 de Estados Unidos, luego de servir cómo el 45.