En medio del partido el fútbol colombiano entre Junior y el América de Cali, la Policía Metropolitana de Barranquilla desplegó un dispositivo de seguridad compuesto por 700 efectivos para mantener el orden dentro del escenario deportivo.
Durante el compromiso disputado en Barranquilla, las autoridades retiraron 66 personas del estadio, incluidos 10 menores de edad, y se impusieron seis medidas correctivas conforme al Código de Seguridad y Convivencia Ciudadana.
Además, se identificó a un grupo de barristas que lanzaron latas hacia otros hinchas, lo que generó preocupación entre los asistentes.
Entre las acciones más relevantes, se destaca la detención de un individuo que, presuntamente, agredió a un hincha en las afueras del estadio una hora antes de la apertura de puertas.
La Policía ha solicitado la colaboración ciudadana mediante un cartel que presenta las características de otras personas involucradas en estos incidentes, ofreciendo una recompensa de hasta $3 millones de pesos por información que permita su identificación.
“Se ofrece hasta 3 millones de pesos para quienes den información para dar con el paradero de estas personas”, dijo Arley Gamba, comandante operativo (E) policía metropolitana de Barranquilla.