Migración Colombia expulsó del país a los tres miembros de la Guardia Nacional Venezolana, que fueron capturados por miembros del Ejército de Colombia, cuando ingresaron al territorio patrio, específicamente por Castilletes, en el desierto de la alta Guajira.
Las primeras indagaciones obtenidas por las autoridades colombianas indican que los tres militares venezolanos habrían ingresado a territorio colombiano en búsqueda de agua, pues la zona en la que se encontraban patrullando en Venezuela, escaneaba ese líquido.
Los uniformados venezolanos fueron identificados como Darwin José Patiño Fariñas y Francisco Ostier Navarro, sargentos mayores de tercera y el sargento primero Luis Alberto Hernández Baptista, todos pertenecientes a la Guardia Nacional del vecino país.
Fuentes de, Ejército de Colombia señalaron que los uniformados venezolanos recibieron un trato respetuoso y fueron sometidos a exámenes médicos, tal como lo indican los protocolos internacionales y posteriormente fueron remitidos a Migración Colombia para continuar con el proceso administrativo de expulsión hacia su país.