Hace dos años, el senador liberal caldense Mario Castaño falleció en la cárcel La Picota cumpliendo una condena de más de quince años por su participación en el llamado cartel de Las Marionetas.
Este cartel construyó una red delincuencial que desvió millones de recursos mediante contratos con el Estado, involucrando también a otros parlamentarios.
El fiscal Elkin Ardila, quien estuvo al frente del caso de Castaño, ahora investiga posibles violaciones de topes de campaña en las elecciones del presidente Gustavo Petro y el alcalde de Medellín Federico Gutiérrez. Recientemente, los movimientos políticos Creemos y Todos Somos Colombia, liderado por la senadora Clara López, perdieron su personería jurídica por decisión del Consejo de Estado.
Ardila Espinosa es actualmente coordinador de la oficina de delitos electorales y forma parte de la cúpula dirigida por la fiscal Luz Adriana Camargo. Lleva más de seis años en la Fiscalía, nombrado por Néstor Humberto Martínez en 2016, y es abogado de la Universidad Libre con especializaciones y una maestría.
Además del caso de Mario Castaño y el cartel de Las Marionetas, Ardila fue responsable de la investigación que resultó en la imputación de cargos contra el excandidato presidencial Rodolfo Hernández y su esposa por la financiación irregular de la campaña presidencial de 2022.
Recientemente, una delegación de investigadores de la Fiscalía visitó las instalaciones del Consejo Nacional Electoral para revisar el expediente de la campaña presidencial de Petro en 2022, donde el gerente de campaña, Ricardo Roa, está vinculado como principal responsable. Roa, actual presidente de Ecopetrol, cuenta con la defensa legal del abogado Germán Palacio.
El Consejo Nacional Electoral también fue objeto de una visita por parte de representantes de la Fiscalía Especializada Anticorrupción, una diligencia que tomó por sorpresa a los funcionarios presentes.