La inconformidad en torno al cobro en el Peaje de Turbaco, ubicado en Bolívar, ha llegado a un punto álgido con la intensificación de las protestas por parte de los residentes locales. Desde hace cuatro días, el acceso al municipio se ha visto obstruido por manifestantes, quienes han dejado claro que no permitirán la entrada ni salida de vehículos hasta que sus demandas sean escuchadas por el Gobierno Nacional.
La situación ha generado un caos vehicular considerable, con cientos de habitantes afectados por el bloqueo, especialmente en la zona conocida como ‘La Virgencita de Turbaco’. Esta acción, organizada por el comité ‘No Más Peajes’, ha recibido el apoyo de residentes de Turbaco, Arjona y otras localidades cercanas.
Las protestas no se limitan únicamente al Peaje de Turbaco, sino que también han afectado importantes vías de comunicación como la Ruta 9005, que conecta San Onofre con Cartagena, y la Ruta BLB, que enlaza el sector del Chorro con Turbana. Además, la entrada a municipios como Clemencia y el corregimiento de Mahates se mantiene bloqueada.
La decisión de reactivar el cobro en el Peaje de Turbaco, especialmente para las categorías 1 y 2 a partir del 18 de mayo, ha sido el detonante principal de estas protestas. Los ciudadanos argumentan que las obras propuestas por el concesionario Autopistas del Caribe, relacionadas con el corredor de carga Cartagena – Barranquilla, no traen beneficios tangibles para la comunidad.
La situación ha generado impactos negativos en la vida cotidiana de los habitantes, quienes han visto interrumpidos sus desplazamientos, incluyendo la imposibilidad de asistir a citas médicas o acudir a centros educativos. La tensión persiste mientras las partes involucradas buscan una solución a esta problemática que afecta a toda la región.