Paisajes, amenidades, accesibilidad, seguridad en el mar y, principalmente, la calidad del agua son los factores que influyen a la hora de elegir un destino.
En 2021, la Universidad Simón Bolívar estudió la calidad del agua de esta playa, siendo la menos contaminada en el departamento.
Desconectarse de la ciudad para disfrutar de la playa, a pocos minutos, es posible para los barranquilleros, quienes pueden acceder a Puerto Mocho, un rincón natural catalogado como uno de los balnearios menos contaminados del Atlántico. Así lo manifestaron un grupo de investigadores expertos en agua de playa, que adelantaron estudios en 11 playas del departamento.
Para el alcalde Alejandro Char, quien realiza seguimientos permanentes al avance del proyecto, “vamos muy rápido y el ritmo de la obra es otro, esperamos tener avances a pasos agigantados. Son las obras que hacemos con los impuestos de los barranquilleros, obras con calidad. Sin duda la playa de Puerto Mocho, Las Flores, la estación, sus trenes, serán un atractivo que llevarán a Barranquilla a otro nivel”.
Uno de los expertos investigadores es Giorgio Anfuso, docente invitado proveniente de la Universidad de Cádiz y una de las voces más destacadas a nivel global respecto a las condiciones de calidad del agua en playas.
Durante una visita reciente a esta playa urbana, los investigadores hicieron seguimiento a la calidad de la arena y el agua, al tiempo que conocieron los avances de las obras de intervención que se ejecutan por parte de la Administración distrital para impulsar aún más el turismo local con nuevos atractivos para propios y visitantes. Allí destacaron el impacto de esta obra, que mejorará, además, el manejo de residuos sólidos, logrando la preservación del ecosistema.
De acuerdo con Anfuso, la calidad microbiológica tanto del agua como de los sedimentos “no es mala”. “Es cierto que hay contaminantes que llegan por el Magdalena, pero la pluma del río Magdalena llega más hacia playas del sur”.
Agregó que esta playa tiene una barrera offshore que se ha formado, por lo que no llega basura proveniente del mar, que supone, generalmente, uno de los principales problemas del litoral del Atlántico. “Hay que llevar a cabo limpiezas importantes de los residuos sólidos”, manifestó.
Por otra parte, Anfuso señaló que la intervención en Puerto Mocho refleja “una recuperación positiva” porque consiste en la restablecimiento ambiental de una zona que estaba degradada, con una posición muy buena cerca de la ciudad de Barranquilla y tiene un atractivo paisajístico importante al tener el manglar detrás y por delante el mar.
“La intervención que se está realizando parece la adecuada, se están construyendo nuevos quioscos, y la verdad que tiene un impacto paisajístico bajo, no son construcciones altas y están usando colores que encajan bien con el manglar y con el color de la arena que se está usando para el relleno artificial, que veo importante realizar y mantener porque esta se va erosionando con el tiempo, pero sin duda es un paso adelante porque la calidad de la arena y del agua es uno de los ‘Big Five’ —cinco parámetros— en los que están interesados los turistas”.
Al respecto enumeró las otras especificaciones con las que cuenta la playa urbana de Barranquilla: “Los otros son el paisaje, la presencia de amenidades (quioscos, baños, espacios para actividades), accesibilidad, seguridad en el baño –en el mar– y aquí es poco profunda porque no hay casi oleaje, por lo que es seguro para las familias, para los niños”, afirmó.
Anteriormente, en 2021, con un equipo de investigadores liderados por Hernando Bolívar Anillo, docente de la Universidad Simón Bolívar, realizaron un estudio microbiológico para identificar la carga existente en sedimentos, arena y agua.
Más detalles del estudio
Sobre la playa, el investigador Hernando Bolívar señaló que con las obras que se ejecutan los barranquilleros vuelven a tener identidad sobre Puerto Mocho, por lo que se vuelven a conectar con este ecosistema que está dentro de la ciudad.
“Tiene una ubicación estratégica: está justo al lado del tajamar de Bocas de Ceniza y por detrás de la ciénaga de Mallorquín, que tiene un ecosistema muy importante de manglar”, especificó.
Sobre la investigación mencionó que en el año 2021 se evaluó, en conjunto con la Universidad de Cádiz, la calidad microbiológica de las playas del departamento de Atlántico, abarcando 11 playas, desde Puerto Mocho hasta Puerto Velero.
“Nuestra hipótesis inicial era que el río Magdalena aportaba una carga microbiana importante en las playas y con eso arrancamos, pensando que la playa más contaminada, por lo tanto, sería Puerto Mocho, pues está justo al lado del río Magdalena. Cuando tenemos los resultados nos dimos cuenta de que era todo lo contrario: la playa más limpia que encontramos desde el punto de vista microbiológico fue Puerto Mocho”, detalló Bolívar.
Ante eso, señaló que generalmente esa tiende a ser la hipótesis principal que manejan los barranquilleros respecto al aporte de carga contaminante – basura- del río a la playa. Sin embargo, por los resultados señaló que “bañarse en las aguas de la playa de Puerto Mocho es seguro para la salud de los bañistas”.
Finalmente, Bolívar recalcó la importancia del buen manejo de las aguas residuales, trabajo que se logrará gracias al sistema de alcantarillado que se ejecuta a través de las obras del Distrito dentro del proceso de recuperación.
“Los estudios a nivel mundial indican que la principal fuente de contaminación, desde el punto de vista microbiológico, son las aguas residuales, entonces lo importante es que hagamos un buen manejo de las aguas residuales. Aquí estamos teniendo unas obras dentro de la playa de Puerto Mocho que va a evitar que esas aguas que se generaban hace unos tiempos y que se depositaban directamente a la playa ya no lo hagan y por lo tanto la calidad microbiológica de estas aguas va a estar segura”.
Proyecto de recuperación de Puerto Mocho
La recuperación integral de la playa de Puerto Mocho comprende una zona para bañistas y deportistas náuticos, cancha de voleibol, comedores, entre otras amenidades. De igual manera se llevarán servicios públicos domiciliarios, por lo que contarán con energía, gas, agua y alcantarillado, contribuyendo a un mejor manejo ambiental de la zona.