Las autoridades estiman que los contenedores contienen 764 toneladas de materiales corrosivos e inflamables, como baterías de iones de litio, detalló Jennifer Homendy, presidenta de la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB, por sus siglas en inglés), durante una conferencia de prensa.
Homendy mencionó que algunos contenedores se rompieron debido al choque, y se observó brillo en las aguas del río como resultado.
Debido a la cantidad de escombros y las condiciones climáticas adversas, Homendy calificó la zona como “peligrosa”, lo que dificulta las operaciones de inmersión para verificar el estado de los contenedores que cayeron al agua.
Los investigadores también confirmaron que a bordo del carguero había 23 personas, incluidos dos pilotos de la nave que serán entrevistados en los próximos días.
Homendy anticipó que la investigación sobre el choque y el colapso del puente podría extenderse entre uno y dos años.
El puente quedó completamente destruido tras el impacto de barco.
Los equipos de rescate suspendieron temporalmente el miércoles las labores de búsqueda de los fallecidos después de encontrar los cuerpos de dos de los seis trabajadores de la construcción que perdieron la vida en el derrumbe.