Del cielo a la tierra y pagando caro las oportunidades falladas. Así se puede resumir el juego donde Colombia terminó empatando ante Uruguay en las clasificatorias al Mundial de fútbol 2026.
El marcador 2-2 quizás no fue el reflejo de lo que se vivió durante todo el encuentro; pero al final el resultado mostró una repartición de puntos que dejó con una mejor sonrisa a los visitantes que por tercera Eliminatoria consecutiva logró sacar algo del estadio Metropolitano que pese a contar con el lleno total no fue suficiente con los golazos de James Rodríguez y Matheus Uribe. Mathias Olivera desde el banco y el goleador Darwin Nuñez opacaron el resultado que parecía positivo para los cafeteros.
Al primer cuarto de hora la tricolor tejió la primera a su favor en una triangulación de Luis Díaz, Rafael Santos Borré y Matheus Uribe, dónde este último sacó un riflazo que casi pone la apertura en un Metropolitano que se tiñó de tiñó de amarillo para apoyar a su selección.
La reacción charrúa fue instantánea y un disparo de Brian Rodríguez fue atajado de manera milagrosa por un oportuno Camilo Vargas.
El juego era intenso, con una Colombia mucho más decidida en buscar el arco contrario y una Uruguay más dedicada esperar en el contragolpe que hacía pasar sustos y figura a un Camilo Vargas.
El bálsamo para los pupilos de Néstor Lorenzo llegó a los 35′ cuando James Rodríguez sacó un espectacular remate luego de una gran asistencia de Santiago Arias que desató la locura en el coloso de la Ciudadela 20 de Julio.
Ya con el marcador a favor la fiesta en la tribuna se encendió y con la bola a los pies los dueños de casa se fueron al descanso.
Para la etapa complementaria, Bielsa movió las fichas dándole espacio a Cristian y Mathias Olivera, este último en la primera que tocó mandó la pelota al fondo cuando solo iniciaba la parte final y silenciar el Metropolitano.
Pese al golpe recibido; Colombia tuvo capacidad de reacción para volver a montarse en la pizarra con un remate de Matheus Uribe que dejó nuevamente la tranquilidad a sus coterráneo.
En la cancha había un solo equipo en cancha y Colombia comenzó el festival del desperdicio donde Mele se convirtió en figura y cuando no pudo tuvo aliado a los palos que le daban esperanzas a una Uruguay que comenzaba a sentir la gota fría de la calurosa Barranquilla.
La intensidad del juego bajó y Uruguay alcanzó a recuperar algo de oxígeno, situación que tendría su recompensa a los 90′ cuando Darwin Núñez cambió por gol el penalti que le costó la expulsión a Camilo Vargas y nuevamente la amargura a los cafeteros .
El pitazo final llegó y Colombia no pudo volver a montarse en la pizarra dejando escapar sus dos primeros puntos en casa y ahora con la mente puesta en Ecuador, selección que visitará el próximo martes 17 de octubre en Quito.