El alcalde de Medellín, Daniel Quintero, habló sobre el controvertido episodio en el que le llamó “hijueputa” al concejal Sebastián López, durante la presentación del proyecto de acuerdo para diluir la participación de EPM en Tigo-UNE.
“Estábamos en el Concejo de la ciudad presentando precisamente la propuesta de Millicom para diluir la participación de EPM en un EPM Telecomunicaciones, una tumbada que nos están metiendo a los antioqueños. Estábamos denunciando precisamente los hechos que han llevado hasta acá, pero además presentando un proyecto de acuerdo para obligar a Millicom a tener que ir a darle la cara a la ciudad”, dijo Quintero.
El alcalde justificó su expresión ante el concejal López, indicando que la tensión era palpable en ese momento y que los concejales del Centro Democrático se sintieron aludidos por su solicitud de que fueran ellos quienes presentaran el proyecto de acuerdo.
Cuando se le cuestionó sobre su elección de palabras, Quintero afirmó: “Yo les pido disculpas a los que se hayan sentido molestos con la palabra, pero no puedo llamar de una manera diferente a una de los antioqueños. Y lamentablemente pues tengo que decirlo con franqueza, también le pido perdón a los antioqueños y a los colombianos por no haber podido evitar que esto pasara, porque lo que pasó aquí realmente es muy doloroso”.
Quintero defendió su enfoque, afirmando: “Lo que es una grosería es que se roben la plata de la gente, eso sí es una grosería.” La entrevista continuó con un debate sobre la corrupción y las denuncias en la Alcaldía de Medellín, en el que Quintero destacó que todas las acusaciones en su contra no habían sido probadas y que muchas de ellas eran estrategias políticas.
El alcalde insistió en que su enfoque estaba en la defensa de lo público y en proteger los intereses de la ciudad y los antioqueños. “Si a usted le parece que el motivo de la indignación es un robo, ¿por qué no nos indignamos? Y esa es una denuncia suya que tendrán que investigar las autoridades,” expresó Quintero.