Barranquilla sigue aumentando su capacidad para atender pacientes que necesiten atención en Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) con la llegada de 20 ventiladores que MIRed entregó este lunes a tres clínicas, los cuales servirán para atender pacientes con COVID-19.
Con esta dotación la capacidad de Barranquilla llega a 802 camas UCI-adulto, con lo que sigue siendo la ciudad con mayor capacidad de UCI por cada 100.000 habitantes dentro del grupo de las cuatro grandes capitales.
El secretario de Salud del Distrito, Humberto Mendoza, explicó que el año pasado Barranquilla contaba con 411 camas de cuidado intensivo. “Este tercer brote ha requerido que la Alcaldía de Barranquilla nuevamente fortalezca las Unidades de Cuidado Intensivo. Hemos pasado de 718 camas, iniciado el pasado mes de marzo, a tener hoy 773 camas. Estos nuevos ventiladores llegarán a sobrepasar las 800 camas de UCI en cuanto se haga el cargue”.
Sin embargo, para Mendoza la solución no son las camas de cuidado intensivo. “La solución es la prevención del contagio. Nuestro mensaje no es que queremos seguir abriendo camas. El mensaje es que hay que cuidarse. La mascarilla cubriendo la boca y la nariz no puede estar faltando en ninguna persona. Hay que lavarse frecuentemente las manos y mantener la distancia de dos metros con las demás personas”.
Los nuevos ventiladores serán distribuidos así: clínica Bonnadona, 10; clínica Reina Catalina, 5 y clínica San Ignacio, 5.
El gerente de la clínica Bonnadona Prevenir, Germán Villegas, manifestó que es un momento crucial para fortalecer la red de Infraestructura y camas UCI. “En este momento es un alivio para la red e instituciones que prestan el servicio de salud en pandemia poder aumentar en un porcentaje la oferta de camas UCI para covid. No quiere decir que por tener mayor oferta de camas en UCI signifique que la gente tenga un fenómeno de relajación. En ese sentido, nuestro llamado es a ser más estrictos con las medidas establecidas por la Secretaría de Salud, por el Ministerio”.
Por su parte, el gerente de la clínica San Ignacio, Darío Valencia Salazar, agradeció la gestión que permitió la llegada de los nuevos ventiladores. “Sabemos la importancia que es tener más capacidad de UCI porque así podremos atender a pacientes que están llegando en malas condiciones a todas las instituciones de Barranquilla. Esto está ocurriendo porque la gente está bajando la guardia, la gente cree que con la vacunación ya resolvieron el problema, y no es así, hay que continuar con el tapabocas, con medidas de bioseguridad, lavado de manos y no hacer reuniones”.
Estas nuevas adquisiciones se unen a los 22 ventiladores que la Alcaldía de Barranquilla trajo el pasado sábado, los cuales fueron distribuidos a las clínicas de la ciudad de la siguiente manera: clínica San Diego (3), clínica Reina Catalina (5), clínica Macsa (4), clínica Jaller (2), clínica Santa Ana (3) y clínica Murillo (5).