Argentina vence en penales a Francia después del empate a tres en 120 minutos para consagrarse campeón del mundo.
¡Para no olvidar!, así quedaron los argentinos al conquistar la tarde de este domingo su tercera copa del mundo venciendo en la final a Francia en un compromiso que tuvo que definirse desde el punto del penalti 4-2 a su favor luego de un apasionante 3-3 dónde se vió un estado de fútbol puro en el cual la albiceleste vivió una auténtica montaña rusa por los obstáculos que puso una Francia aguerrida y que murió con las botas puestas.
La albiceleste salió como una auténtica fiera en búsqueda de su presa ante una selección gala que se vió desnudada desde el arranque con el esquema planteado por Lionel Scalonni, quien incluyó desde el pitazo inicial al extremo Ángel di María, extremo que precisamente iba a marcar el camino de la victoria cuando fue derribado dentro del área por Ousame Dembélé y el árbitro central polaco Marziniack optó por sancionar penalti el cual fue cambiado por gol en una ejecución magistral de El astro Leonel Messi a los 23 minutos de juego.
No conforme con esto, Argentina aceleró el ritmo y fue en búsqueda de ampliar la pizarra la cuál iba a tener sus frutos a los 37′ cuándo apareció el mismo ‘Flaco’ di María rematando de excelente manera luego de un contragolpe perfecto iniciado por los creativos Lionel Messi, Julián Álvarez y Alexis Mac Allister, quién término asistiendo al jugador de la Juventus de turín y así incrementar el éxtasis en la afición Sudamericana que en gran masa se apoderó de las gradas en el estadio Lusail.
La scaloneta se fue al descanso con una cómoda ventaja no solamente en el marcador; también en lo deportivo cumplía un partido perfecto en donde los vigentes campeones no pudieron hacer muchos para al menos acercarse al arco defendido por Emiliano Martinez.
Francia lucía impotente, pese a tener grandes figuras que fueron protagonistas a lo largo de la competición no pudieron mostrar su mejor versión en el partido que definía el título y para la segunda parte Argentina no le dejó margen de reacción y por el contrario intentó ampliar la cuenta.
El reloj comenzó a hacerse aliado de los Sudamericanos y con el transcurrir de este elemento se apreciaba a una Argentina más cerca de encontrar la goleada que a los franceses de reducir la desventaja que solo hasta el minuto 70 pudo generar la primera opción de peligro con un remate que salió desviado generado por su estrella Kilyan Mbappé.
Cuando todo parecía que se encaminaba al tercer título de la Argentina apareció en una ráfaga de 7 minutos las generalidades de Kylian Mbappé quien desde el punto penal y luego con una media chilena igualó la pizarra y dejando frío a Messi y compañía.
El partido empezó nuevamente con un empate; pero con un elenco europeo mucho más motivado y queriendo aprovechar la desilusión de una Argentina que se mostró frágil y nerviosa hasta el punto de exigir al ‘Dibu’Martínez el cual ayudó para que el cotejo se fuera al tiempo extra.
Los 30 minutos finales fueron dramáticos con dos equipos decididos en ir a buscar la victoria y fue allí donde Argentina recobró energías para poder montarse nuevamente en el marcador con un disparo dentro del área de Lionel Messi el cual fue sacado dentro del arco por un defensa frances; sin embargo el árbitro válido la acción legal y el júbilo regresaba a los sudamericanos.
Pero la película todavía no finaliza va y 120 segundos de el pitazo definitivo Francia volvió a la carga y encontró el empate una vez más con Mbappé el cual mostró su efectividad desde el penalti y dejar el 3-3 que dejaba un último capítulo lleno de mucha expectativa e incertidumbre desde la definición en los once pasos.
Luego de 120 minutos de fútbol al más alto nivel todo se definió en los cobros desde el punto del penalti en dónde allí la balanza se inclinó para Argentina que ganó 4-2 con efevtivdad en sus rematadores y un ‘Dibu’ Martínez como figura deteniendo un remate ante los europeos.
Argentina cortó una racha de 36 años sin levantar la copa del mundo y colocó su tercera estrella en el palmares. Además también acabo con un ayuno de 20 años sin poder celebrar para Sudamérica el certamen futbolero más importante del globo terráqueo.