Las conclusiones del reciente informe entregado por el Observatorio de Seguridad Ciudadana de la Universidad del Norte, el cual recolecta y analiza toda la información relacionada con los indices de violencia y criminalidad en la ciudad de Barranquilla y su área metropolitana, indican que durante el año 2020 pese a haberse registrado una disminución en el número de delitos, se evidenció mas violencia en la comisión de los mismos.
Homicidios se incrementaron por primera vez en cinco años
El documento reveló que los homicidios se incrementaron en un 7 por ciento durante el año pasado, lo que significó una ruptura de la tendencia histórica que desde 2016 mostraba una permanente disminución en este indicador, siendo el barrio El Bosque, en la localidad Suroccidente de Barranquilla, el que sigue presentando mayor cantidad de asesinatos en 2018,2019 y 2020, seguido por La Chinita, ubicado en la localidad suroriente y Rebolo de la misma localidad.
Los meses de mayo, julio, agosto, septiembre, octubre y diciembre, registraron el mayor número de homicidios en el área metropolitana, siendo mayo el que disparó el indicador con un incremento del 65 por ciento en comparación con el mismo periodo del año 2019.
Durante 2020, en el 80.4 por ciento de los homicidios que se cometieron en esta zona del país, se utilizó un arma de fuego, mientras que con arma blanca fueron asesinadas el 14.5 por ciento de las personas y el resto con arma contundente.
El informe entrega contundentes conclusiones después de analizar los indicadores registrados a lo largo del año 2020. Dice el documento que se evidencia un aumento por homicidios con armas de fuego a partir de tres modalidades fundamentales: La primera, de mayor participación, es la ocurrencia derivada de estos delitos en la modalidad de sicariato. La segunda, es una consecuencia del porte y consecuente detonación de armas de fuego en situaciones de riñas. La tercera, a partir de hurtos de personas, donde el uso del arma de fuego como medio de intimidación propicia un desenlace fatal de estos delitos.
Agrega que el año terminó con una consolidada tendencia al alza en el porcentaje de víctimas de homicidios de origen venezolano, representando un 8.8% de los casos. Para el año 2020, Barranquilla después de Bogotá, es la ciudad no fronteriza con más población venezolana, llegando a estimarse según las mediciones de Migración Colombia y el DANE, en cerca de 140.000 habitantes, representando un 12% de la población. ·
Dentro de las conclusiones, el Observatorio insta a la implementación de acciones especificas, por parte de la Policía Metropolitana de Barranquilla y la Seccional de la Fiscalía, para la intervención de la violencia homicida a partir de actividades preventivas, disuasivas, de control, inteligencia e investigación criminal., agrega que se requiere mayor efectividad en la intervención focalizada de los 26 barrios priorizados por la política de seguridad de Barranquilla, especialmente sobre aquellos barrios que se han mantenido en el ranking histórico con mayores índices de violencia fatal, entre estos barrios se encuentran El Bosque, La Chinita y Rebolo, los cuales agrupan el 18,92% de los registros de homicidios en 2020.·
Deja claro que se presentó un cambió favorable a partir de la tendencia histórica que venía marcada hacia el alza, presentando una reducción anualizada del 33.9% de los casos contrastados entre 2019-2020, circunstancia enmarcada por las nuevas realidades de interacción social propias de la pandemia por Covid-19. No obstante, hubo un aumento del 14.3% en el uso del arma de fuego en estas conductas, es decir, pese a que hubo menos numero de delitos de hurto se evidencia un mayor nivel de violencia en los que se presentaron a lo largo del año, circunstancia que aumenta la probabilidad de que el desarrollo de estos hurtos derive en consecuencias fatales, incidiendo con ello los registros de homicidios.·
Pese a la cuarentena el lugar donde siguen ocurriendo la mayoría de los hurtos son en vías públicas. Los hurtos cometidos en vías públicas en 2019 tuvieron una participación del 50.4% del total, mientras que en 2020 se redujeron a 38% de los registros.· Se sugiere la realización de estudios y análisis detallados que permitan una mejor comprensión de las circunstancias de accesibilidad a armas de fuego en la ciudad de Barranquilla como medio de intimidación y/o agresión y optimizar los controles frente al porte de armas de fuego en la ciudad.·
El Informe del Observatorio de Seguridad Ciudadana, recomienda la realización de estudios que permitan establecer factores de riesgos asociados a las muertes violentas de personas de origen venezolano, así como la ilustración de las circunstancias que condicionan su victimización, De estos barrios, el caso de El Bosque es particularmente llamativo pues es el barrio con la cantidad mas elevada de homicidios en los años 2018, 2019 y 2020, consecutivamente.
Por ello, es conveniente, afirman, la revisión de las acciones implementadas en el barrio EL Bosque, en aras de comprender los determinantes que han convertido a este barrio en una zona recurrente de agrupación en materia de violencia homicida.
Se dispararon casos de terrorismo
Otro de los reveladores datos que entrega este documento de corte académico, es que mientras en 2020 se registró en la ciudad un solo caso de terrorismo, asociado a la detonación de una granada de fragmentación, en lo que va corrido de 2021, ya se han registrado cinco incidentes de este tipo, lo cual indica que en menos de 60 días se han incrementado en un 500 por ciento este tipo de hechos.
Según ha revelado la Policía Metropolitana de Barranquilla, los casos de detonación de granadas acontecidos en los que va corrido de 2021, están directamente relacionados con retaliaciones contra comerciantes que no han cedido ante la presión de extorsionistas o disputas territoriales entre estructuras criminales que quieren controlar las rentas ilegales.
Aumentaron los casos de violencia intrafamiliar
Otro de los delitos que se incrementó durante el año 2020, fue la violencia intrafamiliar, la cual tuvo un aumento del 16 por ciento en los casos denunciados ante las autoridades,
Lo paradójico de este indicador, es que contrario a lo que pudiera pensarse de manera rápida, el mayor número de casos no se registraron durante el periodo de aislamiento preventivo obligatorio, (marzo-agosto), sino en los meses de enero, febrero, septiembre, octubre, noviembre y diciembre, los cuales pesaron de manera decisiva para que en 2020 se registraran 232 nuevos episodios de este tipo.
El escenario de ocurrencia de la violencia intrafamiliar en Barranquilla y su área metropolitana fueron en su orden: las viviendas con un 58.7 por ciento, y vías publicas con un 39 por ciento.
El arma mas utilizadas para la agresión en el caso de la violencia intrafamiliar fueron los objetos contundentes, los cuales fueron evidenciados en 1.297 caso, seguidos de las armas blancas con 139 casos.
Sobre los casos de violencia intrafamiliar, el Observatorio de Seguridad Ciudadana señala que la situación de la violencia de genero y las limitaciones institucionales para dar respuestas esta problemática, ya eran circunstancias preocupantes antes de la pandemia.
Dice que durante las medidas adoptadas para mitigar los efectos de la pandemia, muchas mujeres, niñas, niños y adolescentes, se vieron condicionados a ser víctimas de maltrato físico al estar confinados con su agresor.
La violencia intrafamiliar tuvo una reducción anualizada de casi la mitad (47.6%) frente a los casos contrastados entre 2019-2020, siendo marzo hasta julio, los meses de mayor reducción frente a estas conductas, es decir, aquellos donde las nuevas realidades de la pandemia se sintieron con mayor intensidad.
En este periodo de tiempo se evidencian porcentajes decrecientes que oscilan entre 58.8% a 71%.· Durante el ultimo cuatrimestre del 2020, en Barranquilla se evidencia una tendencia de convergencia frente al comportamiento delictivo previo a la pandemia. En este periodo de tiempo, las reducciones pasaron progresivamente del 45,2% al 43,9%, al 41,3% y finalmente al 40,9%..
El estudio recomienda a la Alcaldía de Barranquilla, fortalecer los programas de pedagogía y cultura ciudadana, así como las líneas de atención y respuesta de ante la ocurrencia de situaciones que puedan llevar a la materialización de lesiones personales.·
Señala que la anterior situación, articulada con elevados niveles de malestar psicológico, aislamiento, restricciones de movimiento, tensiones económicas, entre otras, agravaron una problemática estructural que ya era bastante compleja y que se vio ilustrada con un aumento del 16,4% de los registros de violencia intrafamiliar, sugiriendo el diseño de estrategias integrales que optimicen la implementación de los recursos y las capacidades tanto de la administración distrital como de la Policía y la Fiscalía, para enviar un fuerte mensaje de disuasión a los agresores, mas allá de acciones de orden meramente administrativo y de reacción institucional y se conecten con otras de tipo judicial.
Aumentó el uso de armas de fuego para cometer delitos
Señala el documento, que hubo un considerable aumento en el uso de armas de fuego para cometer homicidios, indicador que pasó de un 73,2% en 2019 a un 80.4% en 2020. Pero, las armas de fuego no solamente se utilizaron para cometer homicidios, pues en el caso de las lesiones personales ocasionadas por estas, el porcentaje paso del 3.1% en 2019 al 10.1% en 2020, lo cual indica que se triplicó ese indicador.
El uso de armas de fuego por parte de la delincuencia en Barranquilla y el área metropolitana también mostró un significativo aumento en lo que respecta a los delitos de hurto a personas y comercios, los cuales registraron un significativo aumento de 14.3 y 12.2 por ciento respectivamente.
Dismuyen los delitos sexuales
Los delitos sexuales presentaron una sustancial caída del 41.7 por ciento al cierre de 2020, siendo uno de los indicadores mas satisfactorios del informe, pasando de 1107 casos en 2019 a 645 en 2020, lo cual también rompe con la tendencia histórica que mostraba un preocupante ascenso en el periodo 2014-2019.
Sobre este indicador, el informe señala a la vía publica con un 63.6 y las viviendas con un 25.3 por ciento, como los escenarios donde ocurren la mayoría de los delitos sexuales denunciados durante el año pasado.
Sobre este tipo de delito, siguen siendo los niños, niñas y adolescentes, el grupo con mayor cantidad de afectados, pues el informe señala que el 41 por ciento de las víctimas de esta conducta tenía entre 0 y 10 años y el 36.1 por ciento entre 11 mientras que y 20 años, mientras el 14.5 por ciento tienen entre 31 y 40 años.
De los registros de delitos sexuales contabilizados en 2020 se resalta en el informe, que, 1 de cada 3 (34.9%) de los casos ocurrió en horas de la madrugada (entre 00:00am-5:59am). Así mismo, 1 de cada 4 (25.3%) de estos casos ocurrió en la vivienda de la víctima. Adicionalmente, entre las victimas en edades entre 0 y 10 años, los niños representaron el 41% de las víctimas y las niñas el31.1%, siendo la población de menores de edad aquella que presenta un mayor riesgo, es necesario considerar las situaciones de vulnerabilidad que pueden presentar como capacidades de indefensión y de convivencia con sus agresores, o su vulnerabilidad de ser manipulados con fines sexuales sin conocer adecuadamente estrategias de autoprotección.
Concluye el documento, que se requiere fortalecer programas de educación sexual enfocada en la protección por parte de los niños, niñas y adolescentes, de manera que pueda registrar e identificar situaciones de riesgo.
Disminuyeron delitos contra el patrimonio, (hurto a personas y comercio)
Entre los datos mas reveladores que contiene el informe del Observatorio de Seguridad Ciudadana de la Universidad del Norte, está la disminución durante 2020 en dos de los delitos de alto impacto, como son el hurto a personas y hurto a comercio.
El hurto a personas cayó en un 25.7 por ciento haciendo un comparativo de los años 2019 y 2020, cerrando este último año con un total de 8315 casos, frente a los 1187 que se registraron a lo largo de 2019.
Los barrios con mayores casos denunciados de hurtos a Petronas durante 2020 fueron: Centro con 378, Ciudadela 20 de Julio 255, Prado 211, Boston 193, Rebolo 185, Alto Prado 173, Abajo 169 y Simón Bolivar 161.
Un 54.6 por ciento de los hurtos a personas fueron cometidos con armas de fuego, en un 31.4 por ciento no utilizaron armas, un 8.8 por ciento los hicieron con armas blancas y un 4.8 por ciento de los delincuentes utilizaron armas contundentes.
Los días de la semana que registraron mayor número de denuncias de hurto a personas fueron los viernes, con 1323 casos, seguido de los miércoles con 1315, mientras que el mes que mas presentó una caída de este delito en comparación con 2019 fue abril, con 58 por ciento menos de hurtos que en el mismo periodo del año inmediatamente anterior.
Concluye el informe sobre este delito de alto impacto, que se presentó un cambió favorable a partir de la tendencia histórica que venía marcada hacia el alza. Tuvo una reducción anualizada del 33.9% de los casos contrastados entre 2019-2020, atribuyendo que esta circunstancia está fundamentalmente enmarcada por las nuevas realidades de interacción social propias de la pandemia por Covid-19.·
Dice que hubo un aumento del 14.3% en el uso del armas de fuego en estas conductas, es decir, pese a que hubo menos numero de delitos de hurto, se evidencia un mayor nivel de violencia en los que se presentaron a lo largo del año, dicha circunstancia aumenta la probabilidad de que el desarrollo de estos hurtos derive en consecuencias fatales, incidiendo con ello los registros de homicidios.·
Señala que pese a la cuarentena, el lugar donde siguen ocurriendo la mayoría de los hurtos son en vías públicas. Los hurtos cometidos en vías públicas en 2019 tuvieron una participación del 50.4% del total, mientras que en 2020 se redujeron a 38% de los registros.· Sugiere la realización de estudios y análisis detallados que permitan una mejor comprensión de las circunstancias de accesibilidad a armas de fuego en la ciudad de Barranquilla como medio de intimidación y/o agresión y optimizar los controles frente al porte de armas de fuego en la ciudad.
Sugiere la realización de estudios y análisis detallados que permitan una mejor comprensión de las circunstancias de accesibilidad a armas de fuego en la ciudad de Barranquilla como medio de intimidación y/o agresión y optimizar los controles frente al porte de armas de fuego en la ciudad
Por su parte el hurto al comercio cayó en 2020 en un 33 por ciento respecto al año 2019, siendo abril el mes que menos casos registró en comparación con el mismo periodo de 2019, presentando una disminución del 63.3 por ciento si se compara con el año 2019.
Por otra parte, el delito de lesiones personales también cayó en un 47 por ciento, con 1783 casos menos en comparación con los registrados durante el año 2019, siendo el arma contundente la mas utilizada para agredir a las víctimas con un 58.7 por ciento de los casos, Seguda del arma blanca con 25.7 por ciento y el arma de fuego con 10.1 por ciento.
El informe recomienda fortalecer medidas de vigilancia por medio de circuitos electrónicos. Al igual que fortalecer contacto y líneas de pronta respuesta entre autoridades y ciudadanía.
Conclusiones y recomendaciones del estudio
A manera de conclusión, el informe del Observatorio de Seguridad de la Universidad del Norte, señala que la gran mayoría de delitos han mostrado una reducción significativa, seguida por una atenuación que, en muchos casos, refleja una alteración en sus circunstancias de ocurrencia.
En este sentido, considera y estudia los factores de impacto que se han generado en estos indicadores a partir del distanciamiento social, y las medidas de restricción a la movilidad, ley seca, limitantes de aforos y de respuesta de la fuerza pública. “Si bien en términos generales en el 2020 hubo un menor registro de delitos, se puede evidenciar una relación inversamente proporcional con un mayor nivel de violencia en los que se han reportado”.
Esta realidad se relaciona con el hecho que en cuatro de los delitos objeto de análisis focalizado (Hurto a personas, hurto a comercio, Lesiones personales y homicidio) se incrementó el uso de armas de fuego en la materialización de estos hechos criminales, circunstancia que puede estar asociada a dos hipótesis, ambas afectadas por la menor presencia de individuos en las calles..
La primera hipótesis, sugiere una maximización de recursos y efectividad en el empleo de las armas de fuego en la comisión de delitos de hurto, frente a la reducción de oportunidades para su materialización y la segunda hipótesis, se relaciona con las disputas por el control de mercados y rentas ilegales entre diversos actores criminales. En medio de la pandemia, estas organizaciones delincuenciales también vieron afectados sus ingresos a partir de la disminución del numero potencial de clientes en la calle a los cuales ofertarles bienes o servicios ilegales.